Han pasado 15 años desde que se detectaron los graves problemas estructurales que obligaron cuatro años después –12 de agosto de 2010– a demoler el Mercado Municipal y los laguneros siguen a la espera de la nueva instalación en la plaza del Adelantado. Las promesas se sucedieron –durante la demolición los responsables municipales hablaron de que la nueva recova estaría en tres o cinco años– e incluso un equipo de arquitectos ganó un concurso internacional de ideas –junio de 2012– con un proyecto sobre el futuro Mercado de Aguere. Pero el punto neurálgico de tantas ciudades y pueblos, el centro donde abastecerse de productos locales de todo tipo, sigue siendo provisional en La Laguna desde el 11 de diciembre del año 2007, fecha en la que se abrió una recova de emergencia hecha de carpas en la plaza del Cristo.

El Gobierno lagunero ha puesto su maquinaria en marcha desde el inicio del mandato –en el verano de 2019– para reducir los plazos y dar a los responsables de los puestos y en general a todos los laguneros el mercado que se merecen en el menor tiempo posible. Pero hay un gran inconveniente: la imprescindible necesidad de canalizar el barranco de La Carnicería, que atraviesa el subsuelo de la parcela en la que se construirá la nueva recova. Sin esta red de tuberías para evitar inundaciones y daños a la red eléctrica no se puede empezar a construir el Mercado del futuro. El proyecto, sin embargo, está en una fase avanzada y en la actualidad se culminan los trámites para la licitación de la redacción del proyecto del barranco. El Gobierno lagunero espera que este mes el concurso ya esté en la plataforma de contratación del Estado.

El barranco de La Carnicería

El coste de la canalización del barranco de La Carnicería da una idea de la complejidad de la actuación. De hecho, el Gobierno canario concedió una subvención de 4,1 millones de euros, cuyo plazo de ejecución se ha ampliado hasta 2022 después de que el Ayuntamiento solicitara una prórroga mientras resolvía el farragoso proceso burocrático. Tras la aprobación del plan básico –en agosto de 2020 se redacta el plan básico modificado con un nuevo trazado para la canalización del barranco que evite las afecciones a red eléctrica– y la obtención de las autorizaciones pertinentes del Consejo Insular de Aguas, el Consistorio inicia el expediente para la contratación de la redacción del proyecto. En ese proceso está. Una vez que se entregue, deberán licitarse las obras, que tendrán un plazo estimado de 18 meses.

Mientras tanto, operarios municipales refuerzan en este momento la seguridad de la instalación provisional de la plaza del Cristo, que se levantó para que durará no más de cinco años y ya han pasado 14... Demasiado tiempo para una estructura de metal y plástico que presenta un mal estado, como admite la concejala responsable del Mercado, Carla Cabrera. “Ante los años que lleva la instalación en la plaza del Cristo, a pesar de haber sido pensada como una solución temporal, con la entrada del nuevo grupo de Gobierno, en junio de 2019, decidimos solicitar un estudio sobre su seguridad. Si bien concluye que la estructura es segura, aconseja llevar a cabo una serie de actuaciones de mantenimiento y conservación para ofrecer las mayores garantías”, detalla Cabrera. Con un presupuesto de 40.000 euros, los trabajos, que se prolongarán durante un mes, se desarrollan por secciones y en horario de tarde para minimizar las posibles molestias y garantizar la continuidad de la actividad.

El Gobierno de Luis Yeray Gutiérrez pide paciencia pero los responsables de los puestos empiezan a perderla. Esto asegura Venancio Díaz, más conocido como Nacho Díaz, el presidente de la Asociación de Comerciantes del Mercado de La Laguna (Asocomel). “Nos dijeron que íbamos a estar como mucho tres años en la plaza del Cristo pero nos engañaron desde el principio. Eso es lo que más nos duele”, asegura desconsolado Díaz, que precisa: “El lagunero era un icono de los mercados de toda España. Ahora hemos bajado a los puestos de descenso”. “Lo que tenemos ahora mismo es la promesa de Luis Yeray, el alcalde, de que entre los puntos principales de su mandato está la construcción del nuevo Mercado. Sabemos que se está moviendo pero la burocracia de las administraciones es demasiado lenta. Para hacer cualquier cosa en este Ayuntamiento cuesta un mundo”, subraya el coordinador de los responsables de los puestos. “Siempre nos han dicho que sí, que están en ello, pero nunca vemos resultados”, concluye Nacho Díaz.

El Mercado de la plaza del Adelantado no era precisamente una joya arquitectónica. Sus vetustas instalaciones se habían convertido, sin embargo, en un punto de referencia para los laguneros, en pleno centro del casco histórico, frente a la sede del Ayuntamiento. Daba mucha vida a la zona y en especial los fines de semana llenaba de clientes las cafeterías. En sus pasillos se vendía de todo: desde flores y ropa hasta mascotas y todo tipo de productos alimenticios. Todo se torció en 2006, hace ahora 15 años. Varios informes técnicos alertan de viejos problemas estructurales, que se agravan con las obras de construcción del nuevo Palacio de Justicia, justo al lado, solo separado del Mercado por la ermita de San Miguel de Arcángel. Hasta tres informes alertan de que el mal estado de la recova pone en peligro a comerciantes y visitantes: el hormigón es de baja resistencia, los pilares se han debilitado y algunos están muy deteriorados, el armado se ha visto dañado por la alta oxidación de la humedad y se observan grietas relacionadas con los trabajos del Palacio de Justicia, que comienzan en agosto de 2005.

Los técnicos municipales ordenan apuntalar de inmediato el interior del inmueble y el refuerzo de toda la estructura. El edificio se cierra en el verano de 2007 y en diciembre de ese año, los puestos son trasladados a la estructura provisional montada en la plaza del Cristo. Ya la propia demolición del antiguo Mercado se demora. El grueso de los trabajos se desarrollan en pleno verano, el 12 de agosto de 2010. A las 16:30 horas, una gigantesca retroexcavadora devora la fachada en medio de una tupida nube de polvo. Unos días después, todo el inmueble queda reducido a montañas de escombros. El coste de los trabajos para derribar la recova, construida en 1953, alcanza los 802.000 euros. Hoy solo quedan las bases del edificio en un solar ocupado por la mala hierba. En la cara sur de la valla que protege todo el perímetro se lee en letras azules, blancas y moradas “love market”. Al lado, en letras rojas: “Fuera policía de la universidad”.

Modificación del proyecto

Una vez iniciados los procedimientos para la contratación de la canalización del barranco de La Carnicería se va a iniciar de forma paralela un proceso de consultas a los comerciantes para configurar el Mercado del futuro. El proyecto que ganó el concurso internacional en 2012, encabezado por los arquitectos Carlos de Luxán y Almudena Peralta, deberá ser modificado o habrá que contratar uno nuevo para “adaptar el diseño a las nuevas necesidades”, asegura el alcalde lagunero. Luis Yeray Gutiérrez apuesta por un nuevo concurso pues el de Luxán y Peralta entiende que “se ha quedado obsoleto”. Con el presupuesto aprobado se podrá contratar a la consultoría que se encargue de recoger las necesidades y demandas de los comerciantes y todos los requerimientos que se han ido realizando estos años para incorporarlos al nuevo proyecto. “Lo que tenemos perfectamente claro es que será el Mercado que quieran los comerciantes y vecinos laguneros”, deja claro Luis Yeray.

“Esperamos estar iniciando este proceso de participación en el mes de mayo”, tiene previsto Luis Yeray, que recuerda que el nuevo plan no se concentra únicamente en el edificio del Mercado, sino que incluye un parking subterráneo y una plaza en el espacio utilizado actualmente como aparcamiento. Con ello, la superficie total será de 5.500 metros cuadrados para la plaza, 12.000 para el propio Mercado y 7.500 para los aparcamientos.

“Vamos a volver a la plaza del Adelantado sí o sí”, asegura Nacho Díaz, el presidente de la Asociación de Comerciantes del Mercado de La Laguna. “Lo que no sabemos todavía es cuándo”, aclara. “Hay compañeros a los que aquí, en el Cristo, les ha ido bien, pero por norma general las ventas han caído muchísimo desde que estamos aquí, independientemente de la crisis. Antes estábamos en el centro y venía mucha gente a comprar porque les quedaba a mano. Ahora estamos desplazados a un sitio donde a la gente le cuesta más ir. Mucha gente tiene que coger el coche para desplazarse y el parking es reducido y con el agravante de las multas si aparcas mal. Y a cliente que multan, cliente que no vuelve”.

“En las mejores condiciones”

Los comerciantes quieren volver cuanto antes al Adelantado y “en las mejores condiciones”, precisa Nacho Díaz. “Queremos un Mercado moderno, funcional, cómodo para todos, con un amplio aparcamiento que por suerte se contempla. No queremos algo pequeño o en dos plantas como nos querían poner. Queremos el espacio que nos corresponde. A nosotros no nos importa el tipo de edificio, si clásico o moderno. Y si el Ayuntamiento quiere hacer más plantas, mientras nos dejen a nosotros la baja para los puestos... ”.

¿Para cuándo la nueva recova? El Gobierno lagunero no quiere poner fechas para evitar falsas expectativas; solo quiere asegurar, en palabras del alcalde, que hace “todo lo posible” para que sea “cuanto antes”. En lo que sí se compromete es con que el diseño final se decida “con el mayor consenso”. El nuevo Mercado del Adelantado es la guinda que le falta al casco histórico para rematar el cambio iniciado con la peatonalización de las calles.

Abajo, panorámica del solar donde se construirá el Mercado de La Laguna del futuro, con la plaza del Adelantado al fondo y la ermita de San Miguel y el Palacio de Justicia a la izquierda. En la valla se lee: “Love market”. A izquierda y derecha, imágenes del Mercado provisional instalado en la plaza del Cristo hace 14 años.