El Ayuntamiento de La Laguna ayudará a mejorar el jardín de plantas endémicas de San Lázaro, un proyecto desarrollado por los propios vecinos de la zona, “como muestra de su apoyo a esta iniciativa”, según informó el Consistorio. El concejal de Medio Ambiente y Lucha contra el Cambio Climático, José Luis Hernández, acompañado por un técnico municipal, mantuvo recientemente un encuentro con parte de las personas que gestionan este espacio para acordar la intervención a ejecutar para su acondicionamiento.

El edil indicó que la previsión es realizar un sendero adaptado para personas con movilidad reducida y con dificultades visuales. Entre sus características, detalló que los más de 160 ejemplares que componen este pequeño pulmón verde de la ciudad serán identificados con códigos QR. Además, se incluirán balizas auditivas, se colocará una mesa interpretativa en la que se recogerá toda la historia de este jardín y su vinculación con el barrio, se recreará un ecosistema de barranco con una pequeña cascada y se construirá un invernadero, entre otras actuaciones.

Este espacio se encuentra en un terreno de unos 3.000 metros cuadrados y está compuesto por ejemplares de flora endémica de todos los pisos de vegetación de la isla de Tenerife, incluso algunas especies en peligro de extinción como la Bencomia caudata. “Es el resultado de la labor cooperativa de los vecinos de San Lázaro, que en más de 30 años de trabajo han conseguido reconvertir una parcela llena de escombros y basuras en un auténtico jardín botánico”, resaltó José Luis Hernández.

El concejal subrayó a través de una nota de prensa que las posibilidades que tiene este núcleo “son enormes, tanto para el disfrute de la población del barrio, como con una finalidad educativa vinculada a las visitas escolares y científicas; de hecho, estudiantes de la Facultad de Biología suelen hacer prácticas en el lugar”, puntualizó el político de Unidas se Puede. De igual forma mencionó “su gran potencial para incluirlo en futuros itinerarios turísticos en el casco de La Laguna, enlazando todos los enclaves con elementos destacados de nuestra biodiversidad”.

“Los valores que atesora este pequeño jardín botánico son enormes desde diversos puntos de vista –como la conservación de la biodiversidad y la lucha contra el cambio climático, la recuperación de un espacio deteriorado, de sus posibilidades educativas y científicas…– pero, sin lugar a dudas, sobresale por ser una muestra positiva de participación ciudadana”, manifestó el concejal. “Supone un reflejo de lo que puede aportar a la sociedad la unión y el empeño de un grupo de vecinos que se agrupan en torno a un proyecto común y que han logrado superar todo tipo de adversidades, muchas veces, incluso, generadas por las propias administraciones públicas”, concluyó José Luis Hernández.