Defensa anunció el jueves que cede el cuartel de Las Canteras "para usos civiles" y el portavoz del Gobierno canario, Julio Pérez, indicó que se utilizará para acoger inmigrantes. ¿Cuál es la situación hasta donde usted sabe?

El Ayuntamiento, oficialmente, no ha tenido comunicación del Ministerio ni de la Delegación del Gobierno sobre qué van a hacer en el futuro en estos terrenos, que recordemos que son de titularidad estatal. Después de haber leído ese escueto documento que hicieron público, yo me sigo posicionando en que desde el consistorio no entendemos el modelo de grandes instalaciones para darles servicio a estos inmigrantes; creemos en una fórmula más cercana y de menor envergadura. Consideramos que esta llegada masiva tiene que ser repartida por el resto de los municipios de manera equitativa. Si finalmente el Estado entiende que esta es la solución, hay que decir que La Laguna siempre ha sido totalmente solidaria con la inmigración. Primero, solidaria con los vecinos y, por supuesto, con aquellos que más lo necesitan, en este caso con los inmigrantes. El Ayuntamiento no se va a poner de perfil ante esta situación. Así que, si al final se va a llevar a cabo, por supuesto que tenemos que ir de la mano para buscar las mejores soluciones y dotar a este espacio del servicio más adecuado para los inmigrantes.

¿Hay prevista alguna reunión tras ese anuncio a medias?

El presidente del Gobierno de Canarias me trasladó su intención de tratar este asunto en las próximas fechas entre todas las administraciones y que se celebre una reunión entre el Estado, el Gobierno regional, el Cabildo de Tenerife y el Ayuntamiento de La Laguna. Supongo que se hará lo antes posible.

¿Tiene alguna estimación del coste de las obras de mejora del acuartelamiento?

La cifra exacta no la conozco, pero, evidentemente, lo que se ve por fuera no es un buen estado de conservación.

Han pasado siete meses desde que la pandemia lo cambiara todo. ¿Cómo percibe que está La Laguna?

Han sido siete meses francamente complicados de gestionar, y más en un municipio que alberga más de 185.000 personas entre los residentes y los que no lo son. Cierto es que, gracias al buen trabajo que se ha realizado desde las diferentes áreas del Ayuntamiento, canalizando todos nuestros esfuerzos hacia Bienestar Social, hemos podido solventar un problema grande que nos encontramos al principio. En líneas generales, estamos llegando a la ciudadanía y duplicando las cuantías económicas en materia social.

¿Duerme más tranquilo desde que comenzaron las obras en Las Chumberas?

Nos comprometimos a hacer un trabajo silencioso; miraba a los ojos a los vecinos al principio del mandato y les decía que yo no iba a hacer política de esto, y no la he hecho. Hemos conseguido una petición histórica tras doce años de espera. Ahora nos toca empezar a trabajar mirando hacia las siguientes fases, que es una obligación del Ayuntamiento.

¿Le han contestado tras ponerse en contacto el mes pasado con el Cabildo de Tenerife y el Gobierno de Canarias pidiéndoles que desistieran con el tranvía a Los Rodeos?

Formalmente, no, aunque la comunicación tanto con el Cabildo como con el Gobierno es permanente. Enviamos una notificación después de un acuerdo de la Junta de Gobierno en la que les explicábamos el porqué entendíamos que la ampliación del tranvía no era una prioridad para el municipio. Lo sigo manteniendo. Ahora mismo, en la actualidad, y más tras ser azotados por una pandemia de esta envergadura, no podemos estar mirando a este tipo de infraestructuras, y primeramente tenemos que saber cómo se va a desarrollar el proyecto de comunicación de la Isla.

El vicepresidente insular, Enrique Arriaga, dijo fechas atrás que no entendía por qué se opone el consistorio sin realizarse el proceso de participación. ¿Qué le pareció la crítica?

No entiendo la acusación. Siempre hemos mantenido la misma línea: queremos un proceso donde no solamente exista la participación de toda la ciudadanía, sino que tenga mayor peso la voluntad de La Laguna, es decir, de sus vecinos. Lo que he dicho en todas estas ocasiones que me han preguntado es que no toca hablar de una obra faraónica como esta.

¿Cómo se presenta el nuevo presupuesto con este escenario de crisis?

Estamos trabajando con dos especificidades muy claras: por un lado, inversión en el municipio, porque entendemos que tiene que seguir caminando la economía; por otro, focalizar al incremento de partidas en aquellas áreas como el ámbito social y cultural, que para nosotros es fundamental.

Desde la Policía Local de La Laguna corroboraron la pasada semana durante la Mesa de Vivienda algo que desde hace algún tiempo se observa en diferentes barrios: que la okupación ha experimentado un repunte y que genera conflictividad. ¿Le preocupa ese problema?

Yo, como alcalde, me he posicionado siempre en contra de la okupación. Entiendo perfectamente que, en una situación de desesperación por parte de las personas, puedan tener que ir a okupar una vivienda. Pero nosotros también tenemos la obligación como administración pública de intentar corregir este problema con el que contamos en el municipio. No es de magnitud importante, pero sí es cierto que tenemos focalizado en diferentes puntos un repunte de esta okupación, como bien dicen los profesionales de la seguridad. Sé que se está haciendo una labor en esa mesa de trabajo conjuntamente con las diferentes fuerzas políticas, y estamos en contacto directo con el Gobierno de Canarias y con el Cabildo.

Hasta que desde la Policía Local dijeron eso, el concejal de Bienestar Social, Rubens Ascanio, había insistido durante semanas en que hay pocos casos, que mayoritariamente las protagonistas son "mujeres solas con hijos" que entran en viviendas propiedad de bancos y que el problema es avivado por medios de comunicación y "partidos ultras". ¿Qué le parecen esas manifestaciones?

Estoy convencido de que el concejal de Bienestar Social es el que tiene la información mayoritaria sobre estos casos y que lo que ha manifestado lo dice con conocimiento de causa. Estoy también convencido de que la okupación tiene un perfil muy señalado, que es el que el compañero Rubens ha trasladado.

La Laguna y Santa Cruz van a pedir la suspensión de la Vía Exterior. ¿Confía en que este intento, después de otros anteriores, sea el definitivo?

Desde hace ya muchos años el PSOE se ha posicionado en contra de la Vía Exterior, que implica la destrucción de muchísimos metros cuadrados de la zona más fértil del municipio. Hemos puesto alternativas sobre la mesa: creemos claramente en la vía de circunvalación, una propuesta que ya abordamos al principio del mandato.

¿Cómo marcha el pacto de izquierdas lagunero?

El pacto goza no solamente de una muy buena salud, sino de un músculo muy importante. Las relaciones entre las diferentes formaciones políticas son muy buenas. Desde hace ya varios meses la línea transversal de gestionar la política municipal a través del continuo diálogo nos está dando muchísimos resultados; las decisiones son tomadas en mesas donde todos los martes nos reunimos para tratar entre las diferentes concejalías los problemas que tenemos que afrontar con prontitud.

¿Es un pacto de futuro?

No solamente es un pacto de futuro, sino natural. El municipio de La Laguna es un ejemplo de coexistencia entre fuerzas progresistas y de izquierdas. Lo estamos notando, nos lo están trasladando, y a nosotros nos llena de orgullo saber que el buen trabajo, el sacrificio y, sobre todo, la mano tendida para el entendimiento es lo fundamental para poderles dar respuesta a las personas.

Cuando ve a Unidas se Puede cambiar de postura con respecto a lo que decía antes de estar en el gobierno (el desdoblamiento de la autopista del Norte, el tranvía a Los Rodeos, las incorporaciones de militantes procedentes de otras instituciones como personal de confianza?), ¿qué se le pasa por la cabeza?

No tengo por costumbre mirar atrás. Yo no sé los postulados de estas formaciones políticas en el pasado; lo que sí sé es lo que se está trabajando en la actualidad, y hay que poner la vista hacia el futuro con perspectiva. Cuando uno hace las tareas de oposición, entiendo que tiene esa labor de fiscalización del gobierno y, evidentemente, cuando uno llega a cogobernar, como lo están haciendo ahora mismo en el Ayuntamiento de La Laguna, implica también adaptarse a las circunstancias. Yo lo único que puedo transmitir de Unidas se Puede es que es un equipo totalmente cohesionado y con el que da gusto trabajar.

¿Cómo está viendo a sus compañeros concejales del PSOE?

Ha sido bastante complicado; nosotros venimos prácticamente siendo vírgenes en el ámbito político. Ninguno de los que ostentamos ahora mismo acta de concejal, incluso yo como alcalde, habíamos tenido puestos de representación política con anterioridad. Ha sido un año de rodaje, de muchísima adaptación, de ir contra reloj siempre... Pero, en líneas generales, puedo decir que me siento sumamente orgulloso de los compañeros de mi partido, sobre todo de la implicación que están demostrando y porque somos consecuentes con lo que decimos.

¿Cuál es su opinión de la labor de Coalición Canaria?

Coalición Canaria es un partido que tiene todos mis respetos. Evidentemente, después de tantos años es complicado estar en la oposición, y yo entiendo perfectamente que eso tiene un proceso de adaptación y que es una tarea que es muy fría y que se ha de aprender. Yo no tengo nada que decir en contra de CC; única y exclusivamente me centro en trabajar en este gobierno para solucionar los problemas del día a día y de nuestros vecinos, y que La Laguna vuelva otra vez a estar donde se merece.

¿Cómo es su relación con los miembros de esa formación en La Laguna?

Tengo una relación de diálogo fluido, de máximo respeto y de contacto directo con casi todos y cada uno de ellos. La puerta de este alcalde siempre ha estado abierta para los 27 concejales.

Durante el mandato se han repetido episodios de críticas hacia el área de Comercio. ¿Cómo ve la gestión que desde esa concejalía se está realizando?

El área de Comercio siempre ha sido controvertida. Nosotros, desde el primer momento, empezamos a abrir un diálogo directo con los comerciantes y los empresarios; solicitamos la implicación de todas las entidades representativas, como Asecu y Alapyme, y concluimos que teníamos que sacar una partida para subvencionar aquellos meses en que estuvieran estos empresarios sin ningún tipo de ingreso. Evidentemente, podríamos haberlo hecho más rápido, pero la Administración es la que es. Le vamos a dar más de 3.000 euros a cada empresario que haya solicitado esta ayuda. Estamos ya trabajando desde Comercio para ampliar esas subvenciones a aquellos epígrafes que cubran otro tipo de empresas que no se han podido beneficiar de estas ayudas. En línea generales ha sido una gestión positiva.

¿Cómo se ha sentido en la ronda de visitas que ha emprendido por los barrios?

Yo me siento muy cómodo en el trato directo. Además, estoy convencido de que la política de a pie es muy importante para consolidar el trabajo que se está haciendo desde las áreas. Lo que recibo es muy positivo y también tengo que estar abierto a la crítica.

Cuando se trata de colectivos afines a Coalición Canaria, ¿qué le dicen? ¿Hay feeling?

Es que no soy ningún alcalde sectario. Los vecinos tienen que contar con la libertad suficiente como para tener o no afinidad por un partido o por otro. Yo lo que busco, en general, es siempre el bienestar de la ciudad que tengo el honor de presidir y buscarle la solución a los diferentes problemas que tienen los barrios y pueblos.

El Ayuntamiento de La Laguna lleva años diezmado de personal. ¿Ve una solución para este problema?

Voy a dar dos buenas noticias. Después de mucho trabajo, el próximo sábado tendremos la primera prueba de técnicos para cubrir las plazas vacantes de este ayuntamiento. Se han presentado 250 personas para cubrir puestos de técnicos A1. Y la siguiente semana hay más de 2.500 candidatos para las plazas vacantes que tiene el consistorio en una lista de sustitución de auxiliares administrativos. Eso le va a dar mucha fuerza al Ayuntamiento. Después de un año y cuatro meses vamos a poder sacar esas dos listas, que, por fin, van a solventar los problemas con los que contamos en las diferentes áreas gestoras.

¿Cuándo está previsto que empiecen las obras en las ruinas de San Agustín?

La semana pasada me comentaban los compañeros que ya estaba, a falta de un documento, en el área gestora para trasladar la ejecución.

¿Cómo ve usted el velatorio de la plaza del Cristo?

La realidad del velatorio de la plaza del Cristo es que, cuando llegamos a aquí, esto ya estaba todo cerrado. Había un plan director que fue aprobado por el Cabildo y, posteriormente, el Ayuntamiento le dio la licencia de obra. Nos encontramos con una situación bastante compleja, porque había un sector de la sociedad que no entendía por qué en una plaza tan emblemática para los laguneros como la del Cristo se tenía que ejecutar una obra de esta envergadura. Nosotros hemos estado en contacto directo con la empresa que va a realizar los trabajos, también con la Esclavitud del Cristo para mostrarle nuestra preocupación, no ya por la actuación en sí, sino sobre todo por las entradas. Estamos trabajando en accesos alternativos. Lo que implicará esta actuación para lo que va a ser el futuro de la plaza del Cristo tendrá que ser consensuado, sobre todo desde el punto de vista del uso de los accesos, con el Ayuntamiento para que no invada en absoluto este espacio.

¿Se reafirma en que la actuación de peatonalización en Heraclio Sánchez va a ser permanente o hay posibilidades de que se reabra al tráfico?

El urbanismo táctico en La Laguna viene para quedarse. Nosotros consideramos que esta es la mejor manera de ejecutar peatonalizaciones en el municipio, con un bajo coste y que trasladen un mensaje de que somos consecuentes con el medio ambiente. Llevaremos también el urbanismo táctico a los barrios y a los pueblos, así como a la zona de la costa. En los próximos meses veremos un desarrollo muy bonito y bastante llamativo de la calle Heraclio Sánchez.

¿Hay alguna novedad con el Palacio de Nava?

No. Ahora mismo la información que tenemos es la de principio de mandato: hay una clara intención por parte del Gobierno de Canarias de que este edificio se restaure, pero hay que esperar.

¿Con la antigua estación de guaguas se ha conseguido dar algún paso?

Podemos decir que se encuentra muy avanzado este proyecto que nosotros tenemos en mente. Estamos avanzando en esa línea de utilizar ese entorno para la creación del nuevo destacamento policial.

En junio anunció que estaban estudiando posponer la elaboración del Plan General de Ordenación de La Laguna por la crisis. ¿Hay ya una postura firme al respecto?

Los compañeros de la Gerencia de Urbanismo han solicitado informes, incluso nos vamos también a valer de las herramientas de asesoramiento externo para que nos trasladen una composición de cómo nos encontramos ahora mismo con el PGO.

Al día siguiente de su toma de posesión, usted situaba el PGO, una auditoría del Ayuntamiento y la reposición de Las Chumberas como asuntos centrales. ¿En qué quedó la auditoría?

Hemos realizado auditorías en Fiestas y en las áreas de mayor envergadura. Hemos dado con una gran deuda de este consistorio, en su mayoría a proveedores, como ya he dicho en otras ocasiones. Y en eso nos hemos centrado durante prácticamente todo este año, en saldar deudas desde 2014.

Va camino del año y medio como alcalde. ¿De qué se siente orgulloso?

Me siento especialmente orgulloso de haber traído al Ayuntamiento el consenso, de trasladar un mensaje sobre todo de confianza y, por supuesto, de haber conseguido darle respuesta en el ámbito más práctico a los vecinos de Las Chumberas después de muchísimos años de oscuridad y desasosiego.