Escolástico Gil, alcalde de El Rosario, defiende que el procedimiento para la adjudicación de la construcción de la depuradora de La Campana ha sido realizado de forma transparente, con los informes técnicos preceptivos y favorables y a través de una tramitación de emergencia, mecanismo previsto en la Ley de Contratos del Sector Público y que utiliza cualquier Administración Pública cuando se cumplen los requisitos para ello. Estas declaraciones las hizo al tener conocimiento de la remisión de un comunicado a la Fiscalía Anticorrupción, con fecha 2 de octubre, en la que se pone en duda la legalidad de la contratación de Estación Depuradora de Aguas Residuales Industriales (EDARI) del Polígono San Isidro-El Chorrillo, conocido popularmente como La Campana.
Gil asegura que tras la crisis de vertidos de principios de año, que llegó a afectar a parte del litoral de El Rosario, en tan solo diez meses, el Ayuntamiento ha establecido la solución definitiva para la eliminación de las aguas residuales industriales del polígono La Campana y domésticas de la urbanización de Costanera: la infraestructura de Costanera ya está en servicio y la de La Campana, en construcción.
En este sentido, el alcalde recuerda que ya en aquella ocasión, parte de la oposición municipal denunció al Gobierno local por el citado vertido, ocasionado, precisamente, por una negligente actuación cometida en el pasado por el anterior Gobierno local del PSOE al conectar las aguas residuales industriales de La Campana al pozo al que solo se debían verter las aguas domésticas de Costanera. Consta que esta conexión irregular se hizo, al menos, en dos ocasiones, la segunda de ellas el 20 de marzo de 2015.
Igualmente, al equipo de Gobierno de El Rosario le resulta curioso que sea el PSOE, causante del vertido debido a su nefasta gestión en materia de depuración durante treinta años, uno de los partidos denunciantes. Una actitud que no puede calificarse más que de artimaña para desviar la atención respecto a lo realmente importante: la conexión irregular de las aguas industriales hacia Costanera que ellos realizaron y que provocó un atentado mediaombiental en enero de este año.
En cuanto al otro partido denunciante, el Gobierno local lamenta que, mientras CC a nivel insular realiza todas las gestiones posibles en el Cabildo de Tenerife para ayudar a culminar el proyecto de depuración de las aguas del polígono, este mismo partido a nivel local no haga sino torpedear la labor municipal en base a intereses partidistas con una actitud de acoso y derribo.
