El Ayuntamiento de La Laguna pide que el proyecto de ampliación del tranvía hasta el aeropuerto de Tenerife Norte sea paralizado. Después de meses de polémica, el equipo de gobierno lagunero ha acordado en junta de gobierno posicionarse en contra de esta obra. La decisión fue adoptada el miércoles y recogida en un documento de seis páginas. La determinación principal es la de instar al Cabildo de Tenerife y al Gobierno de Canarias a que desistan en su petición de fondos europeos para esta actuación y que, en todo caso, el dinero sea solicitado para la ejecución del carril bus-VAO en la autopista del Norte (TF-5) y otras medidas en el municipio.

"Ahora estamos en una situación de riesgo sanitario, donde una pandemia nos está azotando y donde hay una incertidumbre económico-financiera bastante complicada para los próximos años", contextualizó el alcalde de La Laguna, Luis Yeray Gutiérrez (PSOE). "Ni siquiera tiene sentido hablar de este tipo de construcciones faraónicas, de las que tampoco tenemos sobre la mesa informes técnico-económicos que avalen los beneficios o no que puede llegar a tener para el conjunto de La Laguna y de Tenerife", apuntó.

El regidor local también se refirió a lo ocurrido en las últimas semanas, en las que se conoció que la institución insular y el Ejecutivo regional acordaron solicitar apoyo económico de Europa. "Entendemos que este tipo de informaciones no se tienen que comunicar de la manera en que se ha hecho", lamentó Gutiérrez, dado que el consistorio no sabía de esas intenciones. A eso se une que el presidente del Cabildo, Pedro Martín, había afirmado en junio que el proyecto quedaba suspendido -por la falta de consenso y ante la crisis económica- y que tampoco se había celebrado la consulta ciudadana anunciada meses atrás.

Además, el alcalde socialista defendió un plan estratégico en transporte, y sostuvo que, de llevarse a cabo, una iniciativa como la que se pretende tiene que contar con "un proceso transparente, participativo y, sobre todo, que sea vinculante, donde La Laguna y sus vecinos y vecinas tengan un papel fundamental y crucial".

Acuerdos y alternativas

El texto aprobado por la Junta de Gobierno Local recoge literalmente: "Instar al Gobierno de Canarias y al Cabildo Insular de Tenerife a que no soliciten a la Administración General del Estado que incluya el proyecto de la ampliación de la línea 1 del tranvía metropolitano desde la avenida de La Trinidad hasta el aeropuerto de Tenerife Norte-Ciudad de La Laguna en el Plan de Reformas e Inversiones que España presentará al Plan de Recuperación diseñado por la Comisión Europea para reparar los daños económicos y sociales causados por la pandemia de la Covid-19, por considerar que la ejecución de dicha actuación no es prioritaria en las actuales circunstancias".

A continuación, y como alternativa, prosigue: "En todo caso, debe ser sustituida por la solicitud de financiación europea para la ejecución del carril bus-VAO en la autovía TF-5 (autopista del Norte); y a elaborar todos los proyectos de infraestructuras insulares que discurran por el municipio de La Laguna, de acuerdo con los principios de lealtad institucional, de colaboración, de cooperación y de coordinación interadministrativa, con respeto al derecho a la participación pública, y en el marco del Plan Territorial Especial del Transporte de Tenerife, garantizando en todo momento la adecuada protección del suelo rústico de protección agraria, a la vez que se potencian nuevas medidas de apoyo a la movilidad sostenible".

El consistorio también enumera en el texto diferentes hitos que lo han llevado a rechazar la obra. "En octubre de 2003, el Cabildo Insular de Tenerife aprobó definitivamente el Plan Territorial Especial de Ordenación de Infraestructuras y Dotaciones del Sistema Tranviario en el Área Metropolitana en Tenerife (PTEOID Sistema Tranviario)", recuerda, antes de agregar que ahí se contemplaba la ampliación del tranvía hasta el Aeropuerto. En 2010 fue acordada inicialmente una modificación para alterar el trazado, con lo que se pasaba a plantear un espacio de aparcamiento de 14.000 metros cuadrados y 586 plazas junto a la carretera General del Norte, en un suelo calificado como rústico de protección agraria en el Plan General de Ordenación (PGO) de La Laguna. "Esta modificación no llegó a aprobarse definitivamente", señala.

Fue el 18 de octubre del pasado año cuando se recibió en Urbanismo un correo electrónico con el Estudio de Alternativas de la Ampliación de la Línea 1 del Tranvía hasta Los Rodeos. La información procedía de Metropolitano de Tenerife -la sociedad que gestiona el tranvía- y establecía varios corredores. "El documento analizaba cada una de las alternativas para llegar a la conclusión de que la mejor es la 1B, aunque en lo relativo al criterio Consenso con el Ayuntamiento esta alternativa era la peor valorada", se indica en el acuerdo del pasado miércoles de la Junta de Gobierno. La citada opción es la que atravesaría las calles El Juego, Seis de Diciembre, Juana la Blanca y Marqués de Celada. O lo que es lo mismo: la que siempre generó una mayor contestación ciudadana.

Urbanismo informó en contra

Siguiendo la cronología que se realiza en el documento, el consejero director de la Gerencia de Urbanismo dictó en marzo de este año una resolución que fue notificada al Cabildo y a Metropolitano, y de la que el Consejo Rector de Urbanismo tomó conocimiento. En ella se resolvía emitir un informe desfavorable sobre el Estudio de Alternativas de la Ampliación de la Línea 1 "conforme al interés público urbanístico municipal". Concretamente, los motivos eran que se debió aprobar definitivamente el Plan Territorial Especial del Transporte de Tenerife "para ordenar globalmente la estructura de movilidad insular" antes de sacar adelante el PTEOID Sistema Tranviario"; que la alternativa seleccionada es la "peor valorada" por el Ayuntamiento y que, "entre otras consecuencias, creará un nuevo dique de división de la ciudad", y que supondría una modificación del PTEOID Sistema Tranviario, por lo que sería "preceptivo legalmente realizar una modificación de este Plan, con todas las garantías medioambientales, información pública y consulta a las administraciones públicas".

El documento aprobado por la Junta de Gobierno añade que el alcalde expresó públicamente su malestar por no haber sido informado de la inclusión de la ampliación de la línea 1 del tranvía en la solicitud de financiación europea, "ya que esta actuación condiciona el futuro del municipio y no resulta en absoluto prioritaria en las actuales circunstancias".