La zona de San Juanito es un lugar con encanto: tranquilo, apartado, con las olas rompiendo y las montañas de Anaga como fondo natural. Huele a mar y a veces es como si se tocara el salitre con las manos. Así fue siempre en este rincón de la Punta del Hidalgo, mientras que ahora, desde que está cerrado al tráfico rodado, la sensación de quietud se incrementa. Pero algo ha cambiado. Poco a poco se ha ido convirtiendo en una galería de arte al aire libre. Autores, en algunos casos de reconocido prestigio, han intervenido en el lugar utilizando los muros de los invernaderos a modo de lienzos.

El tramo final -pasada la capilla- fue el primero en ser pintado. Empezaron a aparecer algunos trabajos que todavía siguen allí. Los firman 3ttman, alter ego de Louis Lambert, un francés afincado en la Isla y con prestigio internacional, e Íker Muro, también residente en Tenerife y con obras por el mundo. Otro nombre que se repite en esas composiciones primigenias es menos conocido en el ámbito local, pero que tiene proyección global: Niklas Apfel, un artista residente en Berlín.

Un paseo de Marina Della junto a una amiga por la zona fue el germen de lo que vino después. Pertenece a Wat Crew, un grupo de chicas grafiteras o que se están introduciendo en ese mundillo, por lo que siempre está en proceso de búsqueda de muros grandes para reunirse y pintar. "Vi una finca abierta y me metí para dentro a buscar al dueño, y conseguí su contacto", recuerda. "Es un hombre súper amable que nos dio facilidades para que pintáramos", añade sobre la respuesta que obtuvo del propietario. "Llamé a bastante gente e hicimos la primera quedada, que fue el Muro espacial, mientras que un tiempo después, como había un espacio más hacia el final del camino, volvimos a organizar otra", señala. Concretamente, el Muro espacial es la temática que decidieron establecer para la actuación ejecutada el pasado verano, que se desarrolló en el tramo previo al templo de San Juanito.

Además de Della, pintaron en aquella ocasión los artistas Aloe Bacon, Paulasblue, Beart.ix, Rousi, Adrian.mdr, Another Confused Guy y Nestorelputoamo. También Magua y Erik Air, los responsables del proyecto Muros Libres, una especie de pacto de caballeros entre el Ayuntamiento de La Laguna y los grafiteros. Esa otra es una iniciativa aparte que permite pintar en diferentes espacios de La Laguna sin la necesidad de obtener permisos previos en soportes reseñados por la plataforma en su sitio web. "Nosotras hacemos quedadas y llamamos a todo el mundo, no solo son de chicas", apostilla Della sobre el colectivo del que forma parte.

Rousi, AdánonàdA, Altair, Manez, BelDenMar, Beatriscobo, Giam, Wan.sw94 y Della volvieron el sábado de la pasada semana, un año después, para renovar las obras que habían creado en 2019, deterioradas por el mar. En esta ocasión apostaron por el fondo abisal como hilo conductor. "Normalmente solemos poner una temática en muros así de grandes, porque queda algo más fluido, homogéneo?", expresa Della, que también indica que entre los grafiteros suelen hacer en estos casos un fondo común para comprar entre todos la pintura a mejor precio.

En el tramo último intervinieron Dani Xtero, Aniaguc, Paulas Blue, Della, Rousi, Markeone1 y Altair. El resultado es un nuevo aliciente en un sitio de por sí especial. "A mí La Punta me encanta; suelo ir un montón por allí", afirma la promotora de la iniciativa. "No puedes pintar en muchos sitios en Tenerife pegado al mar, tranquilamente, con permiso y de esa manera", resalta.

"Me ha pasado de todo, pero siempre el no lo tengo por respuesta", apunta al ser preguntada por ese proceso de petición de permiso. "Yo siempre pregunto. Si veo un muro libre y una casa al lado, toco el timbre y consulto; normalmente hay una actitud positiva, aunque es verdad que alguno me he encontrado que me dice que no", prosigue. "Al dueño de esta finca, después de que pintamos la primera vez, le volví a escribir e, incluso, nos abrió su acceso privado para bajar las cosas y se ha portado genial", agradece, antes de agregar que el sábado de la pasada semana, durante la fase de creación de los grafitis, pasó el propietario de otro muro y le dio su número de teléfono para ver la posibilidad de pintarlo.

Las reacciones de quienes se encuentran a Marina Della y sus compañeras en plena faena suelen ser de lo más diversas. "Ha pasado de todo", admite; desde un señor que se paró y empezó a quejarse a otras respuestas más amables: "Hay gente que viene, se hace fotos, se alegran, te agradecen el trabajo".

Wat Crew nació en el marco de Muros Libres. "Se hicieron unas charlas y me invitaron a mí y a otras compañeras a una sobre el grafiti y la mujer, y ahí se vio que había muchas chicas que tenían ganas de empezar y no contaban con un espacio o no conocían a gente, o no sabían muy bien cómo adentrarse en ese mundo", rememora Della. "Las que tenemos más experiencia realizamos la labor de enseñar a las otras", continúa. "Tenemos un grupo de WhatsApp donde hay 30 personas y es muy activo, pero en las quedadas lo máximo que hemos cuadrado son unas 15 o 16 personas pintando", expuso sobre las actividades que realizan y que suelen dar tan buenos resultados como los que han conseguido en el litoral de La Punta.