Las zonas de baño laguneras abandonan hoy el sistema de cita previa. El Ayuntamiento de La Laguna, a través de la Concejalía de Playas y Piscinas, permitirá a partir de este miércoles el acceso a ellas sin necesidad de esa reserva, según informó ayer el consistorio en una nota. Esto supone el final del sistema implantado en las últimas fechas "debido a la exigencia de controlar el número de bañistas y el uso de los espacios comunes".

Concretamente, las zonas de baño de Bajamar, la Punta del Hidalgo, Jóver y La Barranquera permanecerán abiertas al público en tres intervalos horarios: de 7:00 a 10:00, de 11:00 a 15:00 y de 16:00 a 20:00 horas, ya que se mantienen las tres intervenciones diarias para llevar a cabo tareas de desinfección y la limpieza de aseos. Se continúa con el control de acceso, con vigilancia de personal municipal y privado, aumentando el aforo de los espacios del 30% actual al 50%.

La concejala de Playas y Piscinas, Cristina Ledesma, hizo un llamamiento a disfrutar del litoral lagunero durante el verano "con responsabilidad y colaboración, siguiendo las indicaciones de socorristas, auxiliares y personal dedicado a la vigilancia en la zona, para garantizar al máximo la seguridad". En este sentido, la edil recordó que es necesario mantener la distancia mínima de seguridad con el resto de bañistas y utilizar mascarilla siempre que sea preciso. "Además, si se tienen síntomas compatibles con la covid-19, no estará permitido usar las zonas de baño", completaron ayer desde el Ayuntamiento lagunero.

Tras su puesta en marcha a finales del mes de mayo, la página web www.playasdelalaguna.es gestionó las citas para acceder al litoral, con más de 10.000 usuarios que hicieron su reserva a través de la aplicación. A partir de ahora, la previsión es que la plataforma permanezca activa durante el verano, "en principio únicamente como punto de información de interés sobre normas de uso y medidas de prevención".

Como se recordará, esta aplicación ha permitido reservar espacio en las referidas zonas de baño, de manera que al desplazarse hasta ellas se hiciese con la seguridad de que se dispone de sitio. En cada reserva se requería indicar el nombre de todos los usuarios, hasta un máximo de cinco por reserva, y el DNI de todos los mayores de catorce años. Además, la aplicación permitía saber el grado de ocupación en cada momento, así como las medidas de seguridad que se deben cumplir, el tiempo esperado y de la mar. En paralelo, para aquellas personas que no tuviesen acceso a medios digitales se había habilitado un teléfono.