El Ayuntamiento de La Laguna hará frente a la crisis derivada del coronavirus y la declaración del estado de alarma con una batería de 57 medidas. Se trata de acciones en distintas áreas y que ya se están aplicando o que se pondrán en marcha próximamente. Estas fueron aprobadas por unanimidad durante un pleno celebrado en la mañana de ayer y que seguía a un trabajo previo para alcanzar el consenso entre las diferentes formaciones políticas.

No era, como ocurre con casi todo en estas fechas, una sesión plenaria al uso. El alcalde, Luis Yeray Gutiérrez, y los portavoces de cada partido fueron los únicos representantes del Pleno que participaron presencialmente -el resto lo hizo de forma telemática-, mientras que un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas de la pandemia marcó el inicio.

Los 57 puntos empiezan con un agradecimiento global al comportamiento "responsable y ejemplar" de la población en estos días. Entre ellos se encuentra seguir colaborando con el Gobierno de Canarias para facilitar la entrega de los recursos de atención a las familias cuota cero acelerar los trámites de pago de subvenciones a entidades sin ánimo de lucro, y trabajar en la elaboración de una línea de subvenciones para pequeñas y medianas empresas, con una dotación de tres millones de euros. También integran el listado analizar de nuevo los presupuestos, crear un equipo técnico para buscar cuantas ayudas sea posible de otras instituciones o, "dentro de la legalidad vigente", procurar que la mayor parte de las contrataciones de suministros, servicios u obras se hagan con empresas del municipio para inyectarles liquidez y evitar perder puestos de trabajo.

Asimismo, y entre otras medidas del conjunto, se recoge continuar agilizando el pago a proveedores, solicitar al Estado que estudie la posibilidad de una reducción del IRPF; instar a las entidades bancarias a la suspensión del cobro de cualquier tipo de comisión, como "mínimo durante la vigencia del estado de alarma", y apoyar el desarrollo de la renta ciudadana de emergencia.

Choque con los sueldos

Más polémico fue el punto plenario sobre la reducción del 30% de los salarios del grupo de gobierno. El portavoz de CC, José Alberto Díaz, expuso que los partidos del pacto estaban "arrimando el hombro", pero enmarcó la iniciativa en "la esfera del anuncio populista para acaparar titulares". Y es que lamentó que esas formaciones habían presentado esa acción de modo unilateral y saltándose un acuerdo de "dejar apartadas" propuestas que no fuesen consensuadas. Tras ello, hizo público que el grupo de CC había acordado destinar el 40% de lo que percibe del Ayuntamiento a una aportación a Cáritas Diocesana. Fuentes de los nacionalistas precisaron tras el pleno que empezaron ya en marzo a detraer ese porcentaje.

Por su parte, Luis Yeray Gutiérrez dijo que la iniciativa había sido propuesta a los distintos portavoces, y acusó a Díaz de haber remitido a los medios de comunicación las medidas que presentó CC para su incorporación a la moción institucional. Además, avanzó que la reducción de sueldos podría ser hasta de un 50 o 60% en función de lo que pase durante los próximos meses. También Alejandro Marrero, que ayer se estrenaba como portavoz del PSOE; Rubens Ascanio (Unidas), y Santiago Pérez (Avante) criticaron las palabras del líder de los nacionalistas laguneros. Finalmente, la disminución de salarios salió adelante con los votos del gobierno y la abstención de la oposición (CC, PP y Cs).