La titular del Centro Hogar Luz y Esperanza, localizado en el número 10 de la calle Obispo Rey Redondo en La Laguna, defiende la legalidad de esta residencia que atiende a una docena de personas con discapacidad psíquica, que fueron sometidos recientemente a una prueba para comprobar si se habían contagiado de Covid-19, una circunstancia que finalmente fue descartada.

Los responsables de este establecimiento residencial informan de que el centro se encuentra abierto desde el pasado 5 de octubre y que su apertura fue comunicada al Gobierno de Canarias. Además, se tramitó su alta en Hacienda, Seguridad Social y se contrató el seguro correspondiente, así como el contrato de prevención de riesgos laborales y el alta de protección de datos, entre otros trámites.

Además, informan de que su titular está dada de alta como autónoma y tienen dados de alta y con los pagos al día en la Seguridad Social a tres trabajadores como empleados por cuenta ajena. Los responsables también apuntan que están tramitando la licencia de apertura en el Ayuntamiento y que esta condición no implica una ilegalidad del centro, ya que el resto de los trámites están en regla.