La Catedral de La Laguna cerrará hoy sus puertas mientras estén vigentes las medidas urgentes adoptadas por el Gobierno central al prorrogar el estado de alarma declarado para la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por el Covid-19. La medida podría afectar al resto de templos de la Diócesis Nivariense, si bien tal decisión queda en manos de los responsables de cada parroquia, según confirmó a EL DÍA el portavoz del Obispado, Antonio Pérez, también canónigo del templo lagunero.

La medida responde a las nuevas medidas publicadas ayer por el Boletín Oficial del Estado (BOE), a fin de minimizar el desplazamiento habitual de personal en la actual situación, según explicó el portavoz de la Iglesia.

Respecto al resto de los templos de la Diócesis, Antonio Pérez explicó que la decisión de mantener las iglesias abiertas, en las condiciones de tiempo que ya estaban vigentes, queda en manos de cada párroco. Al mismo le corresponderá evaluar la realidad de su comunidad "así como lo que vayan disponiendo las autoridades públicas", tomando todas las medidas que se demandan como necesarias en el caso de mantener abierto el templo.

Igualmente, persiste la suspensión de las celebraciones públicas y comunitarias de la eucaristía en toda la Diócesis, durante el tiempo que dure el estado de alarma decretado por el Gobierno de España. Hasta ahora, los templos permanecían abiertos durante unas horas para que todos los fieles que lo desearan accedieran al mismo, respetando siempre las normas establecidas para evitar el contagio del Covid-19. Ayer, por ejemplo y en el caso de la Catedral de La Laguna, solo algunas personas acudieron a orar y a encender una vela.

En las disposiciones establecidas inicialmente por el obispo de la Diócesis Nivariense, Bernardo Álvarez, se determinó que los lugares de culto permanecerían abiertos donde fuera posible, "según criterio de cada responsable", para la oración personal como signo de esperanza "y para facilitar que vivamos desde la fe estos momentos difíciles, siempre guardando las medidas sanitarias ya establecidas en nuestras disposiciones anteriores". Asimismo, establecía que "los sacerdotes celebrarán misa diaria, sin fieles, pidiendo a Dios por los fallecidos, enfermos, sanitarios, así como por la pronta superación de esta pandemia". Ayer, el portavoz del Obispado ratificó que "sí está suspendido el culto público", si bien "los sacerdotes seguimos celebrando misas en privado".

La presencia esporádica de algunos fieles en los templos más importantes de la Isla, entre los que se encuentra la Basílica de Candelaria, ha venido reflejando el cumplimiento de las directrices que emanan del Obispado. Ya en los primeros días de vigencia del Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, por el que se declara el estado de alarma para la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por el Covid-19 se constató una drástica reducción de la asistencia de visitantes al templo mariano tinerfeño.

Sin Semana Santa

Cabe recordar, asimismo, que en vista de la actual situación y de las medidas que ha ido implementando el propio Gobierno de España, la Vicaría General anunció (el pasado día 16) "la suspensión de las procesiones y de otros actos devocionales públicos de la venidera Semana Santa", que dará comienzo el domingo próximo. En la misma comunicación la Diócesis Nivariense reflejaba que la medida adoptada pretende "favorecer, de la mejor manera posible, la no propagación del Covid-19, así como interrumpir los preparativos que ya se han iniciado".

La web http://obispadodetenerife.es/ aparece como la vía de conexión preferente con lo que se denomina parroquia virtual, el canal a través del que se accede a la emisión digital de misas en directo, así como a los mensajes del obispo, charlas cuaresmales, el evangelio del día, la liturgia dominical y el rezo del ángelus, más la "oración para tiempos de epidemia". Todo ello completado con el pregón de la Semana Santa de La Laguna, que este año estuvo a cargo del sacerdote Jesús M. Gil Agüín, quien lo pronunció el jueves de la semana pasada y que fue emitido en directo por los canales adscritos al Obispado.