La Asociación Juvenil de la Verdellada (Ajuve) cumplirá el 18 de marzo 30 años de vida. La organización vecinal nació en el año 1990 fruto de la unión de dos grupos juveniles. Ninguna de las asociaciones juveniles vecinales de la época sigue vigente a día de hoy, exceptuando a la verdeña. Ajuve llegó a a ser, a finales de los noventa e inicios de los 2000, el colectivo juvenil de barrio con más socios de toda Canarias, alcanzando la cifra de 2.000 asociados. Hoy, se enfrenta a uno de los desafíos más complicados desde su nacimiento: el trasvase generacional y el desapego juvenil.

"La asociación ha sido testigo y partícipe de la etapa de mayor progreso, transformación urbana y social de la historia de La Verdellada", aseguró la Federación Unión Verdeña a través de la publicación El Verdeño. La organización juvenil que fue un éxito en su época, y se enfrentó al gobierno local para conseguir las mejoras necesarias en su barrio, ahora no está pasando uno de sus mejores momentos. La actual presidenta de asociación juvenil, María Rodríguez, se mantiene pendiente de la llegada de ese relevo que pide y necesita el colectivo. "Muchas veces tiene que luchar contra la falta de recursos y la indiferencia de los jóvenes de lo que atañe a su barrio", declaró la citada organización vecinal. "Las nuevas generaciones lo han recibido todo hecho y no les costó nada", manifestó Unión Verdeña. Asimismo, las administraciones municipales no apoyan el asociacionismo juvenil, expuso, añadiendo que "hace ya varios años que no ha habido una Concejalía de Juventud que entienda, apoye y apueste por el modelo de colectivos juveniles". Por parte de la Federación se admitió que "las fiestas de barrio y los carnavales se han convertido en los eventos que logran revitalizar el grupo"; sin embargo, confesó que "no es suficiente".

Uno de los fundadores de Ajuve, Jonathan Domínguez, declaró que, "los jóvenes son la clave en el desarrollo de cualquier actividad vecinal". Además, el que fue presidente del grupo juvenil en 1995 criticó que la participación ciudadana hoy está "secuestrada" por algunas administraciones y partidos. Asimismo, añadió que, "si Ajuve se conserva a día de hoy es por la implicación de los vecinos. Hoy existe una política de cero apoyo a las asociaciones". En el mismo sentido, Domínguez argumentó que este apoyo es "fundamental" para "evitar que haya focos de delincuencia y drogas". "Hay que darle una alternativa a los jóvenes", sostuvo. Por último, explicó que, si hay que salir del barrio de residencia para realizar cualquier actividad, la zona se acabará convirtiendo en "un barrio dormitorio, un barrio sin alma".