El incendio de Gran Canaria tuvo ayer un hueco en la memoria de los laguneros que se dieron cita en el arranque de las fiestas del Cristo. El pregonero y ex fiscal general del Estado Eligio Hernández animó a los laguneros a pedirle "al Cristo de La Laguna, en la celebración de sus fiestas, que les hable a los canarios de todas las Islas, especialmente a los de Gran Canaria".

"Para un herreño que siempre se ha considerado cristiano viejo, militante activo y combativo a temprana edad de las Hermandades Obreras de Acción Católica, y que es devoto del Cristo de La Laguna desde los días alegres de su infancia, es un inmenso honor pregonar sus fiestas". Así comenzó Hernández su intervención, de la que afirmó que "debe ser una verdadera proclamación y expresión de la fe que profesamos" y añadió que "debo mi amor a La Laguna y mi devoción al Cristo de La Laguna a dos ilustres figuras del foro tinerfeño: al abogado lagunero Manuel Aledo y al ilustres abogado, novelista, poeta, culto helenista y diputado republicano Luis Rodríguez Figueroa".

Por su parte, el alcalde de La Laguna, Luis Yeray Gutiérrez, recordó que con este acto se da inicio a "la fiesta grande de nuestra ciudad", que "constituye una celebración que es símbolo de lo que somos: una ciudad solidaria y comprometida, hospitalaria con quienes la visitan, respetuosa con todas las creencias, celosa de su legado artístico y cultural y abierta al mundo", relató el primer edil.