"La Laguna siempre ha sido un laboratorio de ideas políticas para toda Canarias, ha sido un referente de transformaciones, de cambio y de experiencias políticas para el Archipiélago". El edil de Lucha contra el cambio climático y Bienestar Animal, José Luis Hernández, tiene clara esta tendencia del municipio y por eso asume con ilusión las dos áreas de nueva creación en las que tiene competencias. Este profesor de Matemáticas aparcará estos años su labor docente en el IES San Matías para centrarse en convertir a La Laguna en un municipio más respetuoso con el medioambiente y gestionar los recursos naturales.

¿Qué valoración hace de estos primeros meses de nuevo Gobierno?

Es verdad ese dicho: Una cosa es predicar y otra dar trigo. Llevábamos cuatro años haciendo una oposición intensa pero el Ayuntamiento por dentro no es como nos lo imaginábamos porque no conocíamos muchas cosas. Para mí ha sido un aterrizaje bastante complejo pero he sobrevivido al primer mes y creo que ya podemos sobrevivir lo que queda de mandato.

¿Cómo surge la posibilidad de crear las áreas de las que usted se hace cargo, Lucha contra el cambio climático y Bienestar Animal?

Estamos en un momento de transición y de cambio y el organigrama clásico del Ayuntamiento no vale para esta nueva etapa. En el caso de la transición ecológica, la lucha contra el cambio climático es un aspecto que hay que afrontar y afortunadamente en muchas instituciones ya se está trabajando por ese camino. En el caso de Medio Ambiente siempre ha sido, no solo en este Ayuntamiento, un pequeño pegote simbólico que se adosaba a otra concejalía. Ahora partimos de cero y hay que dotar estas áreas de personal porque necesitamos profesionales especializados.

¿En qué punto está La Laguna en la lucha contra el cambio climático?

La lucha contra el cambio climático es algo en lo que deben intervenir todas las administraciones y por eso en el primer pleno de este nuevo mandato aprobamos la declaración de emergencia climática, que nos marca una hoja de ruta porque reconocemos la situación de emergencia que existe. Los comités de expertos de lucha contra el cambio climático de la ONU hablan de que tenemos, como mucho, una década para revertir el cambio climático, así que necesitamos de un compromiso de todas las instituciones. En ese pleno también aprobamos sumarnos al pacto de los alcaldes y en 2030 tenemos que haber reducido la emisión de gases de efecto invernadero en un 40%. Eso no solo se hará con medidas concretas puestas en marcha por el Ayuntamiento sino que tenemos que implicar a toda la ciudadanía a través de medidas de gran calado y todo eso ya se tendrá que ver reflejado en los presupuestos municipales para 2020.

¿Qué medidas de gran calado?

Dentro del urbanismo, queremos desarrollar un ecoeje en colaboración con el Cabildo de Tenerife en el que también esté involucrado el municipio de Tegueste. Además, proponemos una rebaja del IBI para todas las edificaciones que se comprometan a hacer instalaciones fotovoltaicas. Esto último queremos que esté ya incluido en los presupuestos de 2020. Además, queremos desarrollar los tres grandes parques periurbanos: Mesa Mota, la ladera de San Roque y la Montaña de Taco; así como las zonas verdes proyectadas en el PGO porque es importante para la lucha contra el cambio climático. También queremos potenciar la agroecología y, con todo ello, reducir las emisiones de CO2.

¿Cómo piensan combinar el cuidado del medioambiente y la lucha contra el cambio climático con el turismo de naturaleza?

En ese sentido podemos hacer mucho. La Laguna tiene un potencial para desarrollar un turismo de naturaleza impresionante. Tenemos el Parque Rural de Anaga, donde las posibilidades son infinitas y ya se están haciendo muchas cosas para potenciar el turismo sostenible. Pero también tenemos otros elementos en el municipio como las charcas de Tejina, donde ya hay un incipiente turismo relacionado con la avifauna que es además de mucha calidad porque no consume recursos y son personas con alto nivel adquisitivo. El potencial para desarrollar un turismo de calidad relacionado con la naturaleza es muchísimo.

En cuanto al Área de Bienestar Animal, ¿tienen los laguneros un sentido de responsabilidad en cuanto a la tenencia de mascotas?

Sí existe, y además hay una sensibilidad en la sociedad que no había hace décadas. Como la sociedad va avanzando, es obligación de la administración recoger todo eso. Para trabajar en ese sentido, el proyecto más importante con el que contamos es la creación de un consejo municipal de bienestar animal porque queremos que La Laguna siga siendo un laboratorio para los municipios de Canarias. Queremos que de este consejo, en el que tendrán representación los vecinos y las asociaciones animalistas, salgan las directrices para el trabajo que realiza la Concejalía. Hay muy pocos municipios en España que cuentan con este consejo y será un reto bastante interesante. Trataremos de tenerlo articulado en los primeros años del mandato.

¿Están dispuestos los laguneros a compartir los espacios públicos con las mascotas?

La Laguna ha sido pionera en Canarias en la creación de parques para perros. Además, ahora mismo existe una demanda que surge de las propias asociaciones de vecinos para la creación de más parques, es el caso de Ruala, que quiere un parque para perros en La Vega, y también los vecinos de Taco quieren un espacio allí. Lo que pasa es que tenemos un problema interno porque hay una directriz de Urbanismo que se tiene que cambiar para poder adecuarlo porque ahora limita la creación de estos espacios. Sabemos que el uso de espacios compartidos va a generar conflictos, como es el caso del uso de la costa para las mascotas, pero hay que compaginar los intereses. Algunas de estas cuestiones no tenía sentido plantearlas hace diez años pero ahora somos el municipio de Canarias con más animales domésticos por habitantes.

¿Qué opinión le merece la decisión de algunos municipios de prohibir fumar en playas y piscinas?

Yo soy partidario de ser valiente en ese tema y que se prohíba fumar en playas y piscinas. Es una opinión muy personal pero sí que creo que no estaría mal porque ya se hace en muchas zonas, pero es un debate que se debe plantear y aún no lo hemos hecho. También es cierto que ya hay gente que lo demanda.