El concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de La Laguna, Santiago Pérez, defiende la creación de aparcamientos para residentes en el entorno del conjunto histórico. El edil de Avante La Laguna, quien sostiene la necesidad de combinar el uso residencial y el comercial en el casco histórico lagunero, sentencia que "residir en el centro se ha convertido en un calvario para muchos y, teniendo en cuenta que muchos edificios no pueden albergar la construcción de garajes subterráneos, tenemos que tomar medidas que beneficien a los vecinos".

Santiago Pérez adelanta la necesidad de actualizar el Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico de La Laguna. Así, afirma que "en la actualidad no existen estos espacios porque no se ha puesto sensibilidad en este asunto" pero sentencia que "la entrada y salida de los residentes del centro histórico tiene que estar tan regulada como lo está en otras ciudades". Por ello, también insiste en la necesidad de "adaptar los edificios protegidos para que en ellos se pueda vivir con los servicios propios de la actualidad" y Pérez insiste en que "hay que facilitar el acceso a los residentes y una de las medidas que acometeremos es la de habilitar en el entorno del centro histórico una dotación de aparcamientos de preferente utilización por los residentes porque vivir en el centro histórico a veces es un calvario".

Con todo, el edil de Urbanismo destaca que "el centro histórico debe ser una ciudad viva, y no solo en lo comercial sino también en la parte residencial" y eso "requiere de respuesta por parte de la Administración a las demandas de los residentes. Una de las peticiones está relacionada con la necesidad de un mayor número de aparcamientos y otra con una circulación de vehículos razonable, que no se convierta en un obstáculo de la peatonalización pero tampoco en algo imposible".

El edil destaca que "la mejor manera de conservar un conjunto histórico es mantenerlo activo y por eso creo que los esfuerzos meramente conservacionistas están condenados al fracaso". Por ello, defiende que "hay que ofrecer una respuesta armónica entre los elementos que han de ser conservados por sus valores patrimoniales y la adaptación a las nuevas necesidades de vida de los ciudadanos". En este sentido, Santiago Pérez afirma que "esa fórmula de equilibrio tiene que construirse diariamente y es necesario plasmarlo en las normas de ordenación" porque "el punto de equilibrio es mi obsesión".

Pérez lamenta que, en la gestión del conjunto histórico La Laguna, hay "muchos ejemplos en los que la normativa se ha aplicado con una extraordinaria rigidez y a veces sin mucha justificación". No obstante, reconoce que todo ello hay que combinarlo con la adaptación de los edificios a las necesidades y exigencias de la vida moderna. "Un centro histórico no puede tener futuro convertido en un mero centro comercial abierto. Es evidente que la actividad comercial es crucial para mantenerlo vivo pero no puede ser solo eso, sino que tiene que ser ciudad viva, y eso requiere de medidas que la hagan habitable", explica Pérez, quien se ha marcado estas acciones como primordiales en su nueva etapa como edil de Urbanismo.