En capillas, iglesias, patios de viviendas particulares, zaguanes, comercios... La Laguna abrió ayer las puertas de medio centenar de cruces. Fue durante una jornada en la que esta tradición religiosa se entremezcló con la actividad normal de un día laborable en el municipio, así como con los paseos y las compras que siempre deja el 3 de mayo por parte de quienes trabajan en Santa Cruz, donde es festivo. El resultado: unas calles llenas de transeúntes a media mañana de este viernes.

Las obras recogidas en el rutómetro oficial se ubicaban fundamentalmente en el casco histórico. La céntrica calle de La Carrera era uno de los puntos clave. Como primera parada, la Casa Mesa, en cuyo patio central fueron confeccionadas la Cruz de los Remedios, la de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno y Nuestra Señora de la Soledad, y la del Scout Aguere 70, en la que destacaban elementos marinos. En el interior de la Catedral, otra de estas composiciones; un poco más arriba, la Cruz de Salazar de Frías, y varias más ya en la zona de La Concepción: la de la Hermandad y Cofradía de Nuestro Padre Jesús de la Sentencia y María Santísima de la Amargura, la de la parroquia de La Concepción y la del Adelantado. No obstante, la principal novedad en este lugar era la denominada Cruz de Cayetano, en el interior del inmueble que albergará el museo del coleccionista palmero Cayetano Gómez Felipe. A la entrada, y cómo no podía ser de otra forma, los tradicionales mayos, esos muñecos de trapo que acompañan a las cruces en diferentes municipios de la Isla Bonita.

"Hay que destacar las 50 cruces que se encuentran inscritas este año en el rutómetro, aparte de que hay más fuera de él", señalaba ayer el presidente de la Asociación Cruces de Mayo Ciudad de La Laguna, Domingo Carlos Ferrera, que también se detuvo en la variedad de creaciones, así como en el esfuerzo e intento de superarse de sus autores. "Cada año se enriquece el patrimonio cultural de la ciudad", añadió el responsable de este colectivo, que ha propiciado que los participantes hayan pasado de ocho hace menos de una década al medio centenar actual.

Entre otros puntos a visitar también se encontraban la Cruz del Remojo, la del Real Santuario del Cristo de La Laguna, la del Asilo de Ancianos, la de la Hermandad Franciscana de la Oración en el Huerto, la del Museo de Historia y Antropología, la del Casino, la de la Junta de Hermandades, la de la Casa Granero... Mención aparte merecen la históricas capillas de cruz: la de Rodríguez Moure, los Herreros, los Álamos, la Cruz Verde (elaborada en el interior de la iglesia de Santo Domingo debido al cierre desde hace años de esa pequeña construcción) y los Plateros. En esa última se celebró una eucaristía en honor de la Santa Cruz, que estaba previsto que oficiase el párroco de Nuestra Señora de los Remedios, Julián de Armas.

Junto a esa cita religiosa, durante la tarde se sumó a la jornada el pasacalle a cargo de la Banda de Cornetas y Tambores San Miguel, que recorrió las principales capillas y cruces del centro histórico lagunero. Sin embargo, la festividad fue más allá de la ciudad antigua: San Lázaro, Las Gavias, El Coromoto, Camino de La Villa, San Roque, San Miguel de Geneto, La Verdellada -donde la capilla de la Cruz de Marca ha sido restaurada-, Las Mercedes, Jardina o Las Mantecas también confeccionaron cruces que se incorporaron al listado oficial. Además, Barrio Nuevo bendijo este viernes, a la entrada de la parroquia, la nueva cruz de esta zona.

Carteles de la asociación Casco Histórico en la capilla de la Cruz Verde

La Cruz Verde, una de las cinco capillas históricas de cruz, hace años que no abre sus puertas. La asociación de vecinos Casco Histórico colgó unos carteles por fuera del inmueble, en los que se preguntaba si es una "negligencia" que esta construcción se encuentre actualmente en manos privadas. Por su parte, el colectivo Cruces de Mayo colocó un ramo de flores en la cruz exterior.