El caso de la desaparición de piezas del depósito de vehículos municipal de La Laguna se ha quedado en nada. La Justicia ha dado carpetazo en primera instancia a la investigación al no encontrar indicios suficientes para atribuir el presunto robo "a persona alguna". Esto señala el auto de la titular del Juzgado de Instrucción Número 4 de La Laguna, Ana Serrano-Jover González, con el que la magistrada archiva la causa.

Serrano-Jover no ha visto ningún indicio de irregularidad en los siete investigados, los mismos trabajadores del servicio de recogida de vehículos del municipio lagunero que en abril de 2011, hace ahora 8 años, se hicieron cargo de la empresa concesionaria, Autogrúas Poli, para reflotarla de los graves problemas económicos que acumulaba.

Esta decisión judicial se produce dos días antes de que Fernando Clavijo, presidente del Gobierno de Canarias, tenga por primera vez la oportunidad de defender su inocencia en el caso Grúas, una causa por presuntas irregularidades en la gestión del servicio de recogida de coches que se ha desarrollado de forma independiente a la de las piezas desaparecidas del depósito. Llega, además, después de que los denunciantes del caso Grúas, los partidos de la oposición en La Laguna Por Tenerife-Nueva Canarias y Unid@s se Puede, intentaran relacionar ambas investigaciones para justificar la existencia de una maraña presuntamente corrupta en el Ayuntamiento lagunero cuando Clavijo era alcalde. La juez ha dejado claro que en cuanto a las piezas no se puede acusar a nadie de delito alguno.

La denuncia de los repuestos partió de seis trabajadores de esta misma empresa que fueron despedidos por los siete que compraron la compañía. Se les rescindieron los contratos por razones económicas como consecuencia del plan de reestructuración de Autogrúas Poli. Precisamente esos seis trabajadores presentaron la denuncia contra los siete compañeros que se habían hecho cargo de la empresa después de que estos los despidieran. Lo hicieron tres de ellos el 20 de marzo de 2012 y al poco se sumaron otros tres.

Los siete trabajadores denunciados fueron acusados de llevarse las piezas e incluso uno de vender algunas de ellas por internet, hechos que la Justicia ha demostrado que no son ciertos. Es más, durante la instrucción quedó demostrado que no se ofreció por internet ninguna de las piezas desaparecidas del depósito, sino que era otro empleado -que no está en el grupo de los denunciantes ni de los denunciados- que había puesto piezas a la venta de un todoterreno de su propiedad, nunca de un vehículo del depósito municipal, situado en la calle Espinero, en el Camino de la Villa, en el entorno del aeropuerto de Los Rodeos.

Los siete investigados recibieron ayer la noticia del auto de sobreseimiento con gran satisfacción. Uno de ellos aseguró que espera que con esta decisión se acabe uno de los calvarios que han tenido que sufrir desde que en abril de 2011 se hicieron cargo de Autogrúas Poli. Estos siete trabajadores son los mismos que recibieron el préstamo de 120.000 euros del Ayuntamiento lagunero, en 2014, para sacar adelante la concesionaria de las grúas que centra las investigaciones del comentado caso Grúas y que según XTFE-NC y Unid@s se Puede fueron beneficiados supuestamente por Clavijo, entonces alcalde, por amistad. La causa de las irregularidades de los repuestos, no obstante, nunca ha sido pieza separada del caso Grúas, sino que ha llevado una tramitación judicial independiente.

Los seis empleados despedidos se personaron en la Policía Local para relatar los siguientes hechos: que un año antes, el 13 de abril de 2011, les prohibieron la entrada al depósito municipal donde trabajaban, que varias semanas después sí se les permitió pero que entonces se negaron a acceder hasta que se acreditara el estado de los coches allí custodiados. Aseguraron a los agentes que les constaba que algunos vehículos habían sido desguazados y sus piezas vendidas de forma presuntamente irregular. Las sospechas recayeron en los siete compañeros que habían adquirido la empresa a José Padilla, quien había conseguido la concesión del servicio de grúas lagunero en el año 2004 después de su privatización.

La Guardia Civil realizó "una detallada" investigación del estado del depósito municipal pero se encontró con que los vehículos en los que faltaban piezas habían entrado en el depósito en fechas "muy anteriores" al traspaso de la compañía. Había algunos incluso que estaban allí desde 2004. "Respecto a los titulares de los vehículos que fueron localizados, muchos se habían desentendido de ellos, especialmente después de conocer la cantidad que debían pagar para retirarlos", asegura la juez en el auto de sobreseimiento.

Los siete denunciados negaron a la magistrada que se llevaran piezas del depósito así como que las vendieran. Sí dijeron recordar que antes de tomar el control de Autogrúas Poli permitieron el acceso a personas que venían de parte del responsable de la empresa sin saber exactamente para qué. Asimismo, aclararon que prohibieron el acceso a los empleados en abril de 2011, solo durante unas semanas, para que la Policía Local hiciera un informe de la situación del depósito municipal. Tampoco ellos mismos entraron durante esos días para facilitar el trabajo a los agentes locales.

La jueza solo encontró un caso en el que pudiera descubrirse al autor de la desaparición de piezas, una persona además sin ninguna conexión con los trabajadores de Autogrúas Poli, y que según Ana Serrano-Jover González "habría falsificado la firma" de uno de los trabajadores denunciados "para confeccionar una supuesta autorización, de fecha 26-12-2011, que le sirvió para llevarse del depósito piezas de un vehículo". El posible delito preescribió en enero de 2017.

La juez, eso sí, señala que había "un total descontrol" sobre los vehículos que había en el depósito de La Laguna en el momento de la denuncia. "No existían inventarios más que de forma extraoficial y posteriores a los hechos investigados", precisa la titular del Juzgado de Instrucción 4 de La Laguna. Los siete trabajadores denunciados aseguraron que la gestión hasta que ellos tomaron el mando de Autogrúas Poli era responsabilidad de José Padilla.

"Estoy tranquilo: por fin podré dar mi versión"

"Estoy tranquilo. Por fin podré explicar el expediente". Esto señaló ayer Fernando Clavijo, presidente del Gobierno de Canarias, sobre su comparecencia de mañana, Miércoles Santo, como investigado en el caso Grúas ante la magistrada del Juzgado de Instrucción Número 2 de La Laguna, Celia Blanco. Será la primera vez que Clavijo pueda defender su inocencia desde que se abriera la causa hace ya dos años. La multitud de vaivenes de este caso insólito, que primero fue archivado al no hallarse ningún indicio de delito y luego reabierto, ha hecho que el presidente de Canarias aún no haya podido defenderse en sede judicial mientras de forma paralela ha sido objeto de múltiples acusaciones.

En una entrevista a COPE Canarias, recogida por Europa Press, Fernando Clavijo admitió que afronta su declaración con "tranquilidad". Clavijo, que había solicitado comparecer "cuanto antes" una vez se aclaró su condición de investigado, declarará ante la magistrada a las 09.30 horas de mañana, en plena Semana Santa, para dar su versión de los hechos, y solo dos días después de otra juez, la del Juzgado de Instrucción Número 4 de La Laguna, archivara la denuncia por el presunto robo de piezas del depósito municipal de vehículos, que se desarrolló de forma independiente al llamado caso Grúas.

El presidente canario indicó que podrá explicar a la juez por qué levantó el reparo del interventor contra la decisión del Ayuntamiento de dar un préstamo a Autogrúas Poli de 120.000 euros para tratar de solventar los problemas financieros de la concesionaria. "Todo quedará perfectamente claro y explicado y espero que cuanto antes se resuelva este asunto", añadió Clavijo. Hay que recordar que el préstamo se devolvió de forma íntegra al Consistorio lagunero a los seis meses sin causar perjuicio algunos a las arcas municipales.