Guerra en Ucrania

El director de la OIEA presenta al Consejo de Seguridad un plan para asegurar la planta nuclear de Zaporiyia

El argentino Rafael Mariano Grossi ha presentado un plan de cinco principios para tratar de garantizar la seguridad en la central nuclear en el sureste de Ucrania

Rafael Grossi (dcha.) y los miembros de la OIEA, ayer, en la central de Zaporiyia.

Rafael Grossi (dcha.) y los miembros de la OIEA, ayer, en la central de Zaporiyia. / EFE

Idoya Noain

"Somos afortunados de que no haya ocurrido aún un accidente nuclear. Estamos lanzando los dados. Y si esto continúa, un día se nos acabará la suerte”. Con esa severa advertencia sobre los riesgos de una catástrofe en la planta nuclear de Zaporiyia, y alertando de que “la situación es extremadamente frágil y peligrosa”, ha intervenido este martes ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas Rafael Mariano Grossi, el director del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA). El argentino ha presentado un plan de cinco principios para tratar de garantizar la seguridad en la central nuclear en el sureste de Ucrania, la mayor de Europa, y bajo control de Rusia desde marzo de 2022, poco después de que Moscú iniciara la guerra.

El listado de Grossi, que visitó Zaporiyia el pasado marzo y alertó sobre el aumento de combates, se abre con el principio de que “no debe haber ataque de ningún tipo de ataque desde o contra la planta, en particular que tenga como objetivo los reactores, el combustible usado almacenado y otra infraestructura crítica o personal”, seguido por el de que la planta "no debe usarse como almacén o base de armamento pesado".

Suministro eléctrico

En tercer lugar se insta a que no se ponga en peligro el suministro eléctrico que alimenta Zaporiyia. Como ha recordado Grossi, la central nuclear ha perdido por completo ese suministro en siete ocasiones desde que empezó el conflicto, la última vez la semana pasado, quedando dependiente de generadores.

El cuarto principio del plan de la OIEA reza que "deben ser protegidos de ataques o actos de sabotaje todas las estructuras, sistemas y componentes esenciales para la operación segura de la planta". Por último, se estipula que no se debe emprender ninguna acción que mine los cuatro principios previos.

Países como Estados Unidos y Reino Unido, miembros permanentes del Consejo de Seguridad, han mostrado su apoyo y pedido respaldo completo al plan de de Grossi y han usado la sesión para denunciar a Rusia. Por su parte el embajador de Moscú ante la ONU, Vasily Nebenzia, ha negado tajantemente que Moscú esté usando la planta como almacén de armamento, munición o personal militar que pudieran emplearse para un ataque desde allí, y ha acusado a Kiev y sus aliados occidentales de ser quiénes están poniendo en peligro la seguridad de Zaporiyia.