Los principales partidos de Irlanda del Norte han evidenciado de nuevo este jueves sus diferencias, abocando al territorio a unas nuevas elecciones anticipadas que previsiblemente serán convocadas desde Londres ante la falta de avances en Belfast.

Los acuerdos de paz de 1998 estipulan un reparto de poderes entre unionistas y republicanos que se tambalea tras la victoria electoral del Sinn Féin y las reticencias del Partido Unionista Democrático (DUP) con el protocolo establecido en el pacto del Brexit para Irlanda del Norte.

El Sinn Féin reivindica su derecho a liderar el Gobierno y el DUP ha dejado claro en varias ocasiones, este mismo jueves incluso, que no desbloqueará las instituciones ni nombrará ministros si se revisan las trabas que, en su opinión, establece el protocolo para las relaciones comerciales con la isla de Gran Bretaña.

El nuevo ministro británico para Irlanda del Norte, Chris Heaton-Harris, ha hecho esta semana un último intento de que las partes acerquen posturas, con un ultimátum bajo el brazo que expira este viernes a medianoche, 24 semanas después de las elecciones. Pasado ese plazo, se convocarán nuevas elecciones, previsiblemente el 15 de noviembre, según la BBC.

El primer ministro, Rishi Sunak, ha pedido por boca de un portavoz al DUP que permita la actividad parlamentaria, alegando que "los ciudadanos de Irlanda del Norte se merecen una administración con plenos poderes y elegida a nivel local, que responda a los problemas a los que se enfrentan".

Sin siquiera haber facilitado la elección de la mesa del Parlamento norirlandés, el líder del DUP, Jeffrey Donaldson, ha dejado claro que no variarán sus posiciones hasta que no haya una "acción decisiva" sobre el protocolo del Brexit, "para retirar las barreras comerciales dentro del propio país".

La vicepresidenta del Sinn Féin, Michelle O'Neill, que reivindica su derecho a ser ministra principal, ha atribuido a Donaldson un "fracaso de liderazgo" y ha reclamado un "enfoque conjunto" entre Londres y Dublín si, como parece, no hay ningún acuerdo de última hora en Belfast.