El Gobierno de Portugal prepara un proyecto piloto para probar la semana laboral de cuatro días en las administraciones públicas, a semejanza del sector privado, y ya cuenta con instituciones que han mostrado interés en este modelo.

"Estamos trabajando con el Ministerio de Trabajo para poder desarrollar un proyecto semejante", aseguró la ministra de Presidencia, Mariana Vieira da Silva, tras ser cuestionada, en una entrevista publicada por el diario luso Público, sobre las iniciativas piloto que llegarán al sector privado en 2023.

La ministra, "número dos" del Gobierno del socialista António Costa, afirmó que ya hay entidades públicas dispuestas a probar este nuevo modelo. "Existen instituciones que quieren experimentarlo, pero también depende de la metodología que sea seguida. Principalmente, si será en una organización en particular o en un conjunto, para poder evaluar el impacto", explicó. Pero alertó de que habrá "diferencias" con el sector privado porque hay "muchos servicios que no son compatibles con ese tipo de organización".

Vieira da Silva consideró que las diferentes dimensiones de la organización del trabajo, como el teletrabajo o la semana de cuatro días, son una "agenda fundamental para los próximos tiempos".

El Ejecutivo luso tiene previsto presentar en breve el proyecto piloto de la semana de cuatro días para el sector privado y se espera que pueda empezar a implementarse ya en 2023.

La semana laboral de cuatro días entró en el debate público luso después de que el Partido Socialista lo incluyese en su programa electoral -para determinados sectores- para las legislativas del pasado 30 de enero, que ganaron con mayoría absoluta.