Corea del Norte lanzó este jueves a modo de prueba lo que el Estado Mayor Conjunto (JCS) surcoreano consideró como tres misiles balísticos de corto alcance al mar de Japón (llamado mar del Este en las dos Coreas).

"El ejército de Corea del Sur detectó tres misiles balísticos de corto alcance disparados por Corea del Norte desde el área de Sunan en Pionyang hacia el Mar del Este alrededor de las 18:29 (9.29 GMT) de hoy", explicó el JCS en un comunicado.

Sunan es la zona donde se encuentra el aeropuerto de Pionyang y desde donde el régimen realizó en marzo sus primeros lanzamientos de misiles balísticos intercontinentales (ICBM) en cinco años.

El lanzamiento de este jueves, el decimosexto desde que empezó el año, se produce apenas cinco días después de lanzar un misil balístico desde un submarino (SLBM) y es además la tercera prueba de este tipo en apenas una semana, un ritmo motivado por el plan de modernización armamentística aprobado por Pionyang el año pasado.

La prueba parece ser además una clara muestra de fuerza puesto que llega el mismo día en que el régimen anunció la detección de sus primeros casos de covid-19 desde que empezó la pandemia, lo que depara un escenario de incertidumbre en un país que no ha administrado ninguna vacuna y cuenta con recursos epidémicos insuficientes.

Por su parte, la guardia costera nipona informó de que lo lanzado este jueves habría caído en aguas del mar de Japón sobre las 18.43 hora local (9.43 GMT) fuera de la zona económica exclusiva (EEZ) del archipiélago.

El Ministerio de Defensa nipón se encuentra recolectando detalles del lanzamiento, mientras que el Ejecutivo que lidera Fumio Kishida convocó una reunión de emergencia para analizar el último test norcoreano.

Este test llega en un momento en el que Corea del Norte, que permanece completamente aislada del exterior por la pandemia, está preparando lo que aparenta ser su primer test nuclear de 2017, el cual, según los expertos, podría tener lugar este mismo mes.

El presidente estadounidense, Joe Biden, viaja a Seúl la semana próxima y se espera que envíe un mensaje a Pionyang, que ha ignorado las invitaciones de Seúl y Washington para retomar un diálogo que permanece estancado desde la fracasada cumbre sobre desnuclearización de Hanói de 2019.