Un caso de violación tan escalofriante como indignante. Una francesa de unos 60 años fue violada durante una década por una cuarentena de hombres desconocidos, contactados por el marido de la víctima, que la drogaba para que no se diera cuenta de las agresiones. Un brutal caso de violencia sexual del que informó este miércoles el diario local 'La Provence' (en la región de Marsella) y por el que han sido detenidos 44 hombres, supuestamente implicados. 

"Es un caso inédito por el tiempo de duración (entre 2010 y 2020) y por el número de autores", dijo a la Agencia France Presse el comisario Jérémie Bosse Platière, de la policía judicial de Aviñón, cerca del pueblo del sudeste de Francia donde ocurrieron las agresiones. Este agente precisó que el marido de la víctima grabó todas las violaciones sufridas por su esposa. "Es raro disponer de tantas pruebas de un caso de violación, (...) aunque la víctima, inconsciente durante los hechos, no se acuerda de nada", añadió.

Estos empezaron hace más de una década en la pequeña casa de esta pareja en la localidad de Mazan. Entonces, el marido, un artesano jubilado de 68 años, se ponía en contacto con otros hombres a través de una página web de encuentros sexuales, en la que les proponía que se aprovecharan de su mujer inconsciente. "El marido utilizaba ansiolíticos muy potentes para drogarla y la dejaba desnuda encima de la cama y ponía la calefacción para evitar que ella se despertara", explicó Bosse, quien precisó que hasta 45 hombres participaron en este tipo de violaciones.

Un periodista y un bombero

El fiscal de la República de Aviñón, Philippe Guemas, informó de que 33 hombres fueron imputados y otros nueve siguen arrestados, entre ellos el marido. Entre los sospechosos, hay todo tipo de perfiles, como un empresario, un operario de almacén, un enfermero, un bombero o un periodista. Algunos de ellos niegan los hechos, mientras que otros aseguran haber participado en lo que creían que era un "intercambio libertino". Todos ellos son sospechosos de haber cometido un delito de violación y de voyeurismo grave.

Las fuerzas de seguridad descubrieron estas violaciones a partir de un incidente el 12 de septiembre del año pasado. Ese día, el agente de seguridad de una tienda llamó la atención al marido, instigador de las violaciones, al verlo cómo se dedicaba a grabar con su móvil por debajo de las faldas de mujeres. La policía lo detuvo por este motivo y a partir de ahí empezó una extensa investigación que desveló toda la trama. Cuando consultaron su ordenador, vieron los vídeos en los que se veía a su mujer inconsciente que era violada por otros hombres. También descubrieron sus mensajes en páginas de internet donde proponía la posibilidad de aprovecharse de su pareja. 

La mujer violada, madre de tres hijos treintañeros, ignoró los hechos durante todos esos años. Solo tuvo conocimiento de ellos gracias a la investigación policial. Estos la dejaron "muy impactada" y decidió abandonar el departamento de Vaucluse para instalarse en la región parisina.