Al menos seis mineros han muerto en México tras el derrumbe de una mina en el estado de Coahuila, después de que se haya informado este miércoles de la recuperación de dos cuerpos, mientras que otro sigue desaparecido. Así lo ha comunicado la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, que ha añadido que los trabajos de rescate continuarán "hasta encontrar al séptimo y último minero".

El último cuerpo hallado, el sexto de los atrapados en la mina, ha sido el de José Leopoldo Méndez Sánchez, según recoge el medio mexicano 'Zócalo'. Previamente, la organización civil Familia Pasta de Conchos ha confirmado, a través de su cuenta de Twitter, que se ha logrado rescatar el cuerpo de Carlos Moreno Cervantes. Se suman así a los cuerpos de Pedro Ramírez, Humberto Rodríguez, Mauricio N. y Cruz Marín. Faltaría por localizar Ernesto Damián.

El gobernador de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme, explicó el viernes pasado, tras el suceso, que el incidente se habría producido por el agua "proveniente de las lluvias" y recordó que en octubre de 2020 se restringió el acceso a la mina, si bien, tras observar que se cumplían las medidas adecuadas en una inspección, se levantó dicha regulación y permitió continuar con los trabajos. Sin embargo, Familia Pasta Conchos detalló que insistió a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) sobre que la mina no reunía las condiciones necesarias para que continuase la actividad.

Al lugar se han desplazado 300 trabajadores de organismos de rescate, autoridades locales e incluso la Guardia Nacional y el Ejército, que han desplegado a su personal en la zona para colaborar en labores de rescate y seguridad. Asimismo, han acudido al lugar cuerpos de seguridad y rescate de otros estados.