Un hombre apuñaló este viernes a una policía municipal cerca de la ciudad francesa de Nantes y fue detenido poco después de haberse dado a la fuga con el arma de servicio de la víctima, que quedó herida de gravedad.

El ministro del Interior, Gérald Darmanin, anunció en Twitter que los gendarmes habían "neutralizado al individuo sospechoso de la agresión", identificado como Ndiaga Dieye y nacido en 1981. Posteriormente, la Policía francesa confirmó la muerte de esta persona.

La víctima inicial es una agente de 40 años de edad y más de 15 años de servicio que recibió varias puñaladas en los brazos y en las piernas por un individuo que, según la investigación preliminar, había entrado en la comisaría, situada en la localidad de La Chapelle sur Erdre, a tres kilómetros al norte de Nantes, para quejarse por un problema con su vehículo.

La agente se encuentra ingresada en el hospital universitario de Nantes y, a pesar de la gravedad de las heridas, su vida está fuera de peligro, de acuerdo con las fuentes del medio Ouest-France.

Acto seguido, la Policía francesa lanzó una operación a gran escala que involucró a más de 200 gendarmes, dos helicópteros y tres unidades caninas en busca del sospechoso, que se apoderó de la pistola perteneciente a la gendarme antes de darse a la fuga en un Volkswagen Golf. El vehículo se estrelló contra una mediana y comenzó una huida a pie.

Dos agentes sufrieron heridas leves en la mano y en el brazo, según las fuentes de Ouest-France. Poco después, se ha confirmado la muerte del sospechoso tras sucumbir a un paro cardíaco a consecuencia de las heridas sufridas durante el intercambio de disparos, según fuentes judiciales a la cadena BFMTV.

Según otras fuentes policiales a la misma cadena, Dieye salió de prisión hace unos meses tras cumplir varios años por múltiples delitos de derecho común. Fue diagnosticado con esquizofrenia y también habría sido "radicalizado" en el Islam durante su estancia en la cárcel, hasta el punto de que su nombre figuraba en el expediente de informes para la prevención de la radicalización islamista.

El ataque a la agente municipal tuvo lugar en La Chapelle sur Erdre hacia las diez de la mañana, hora local (08.00 GMT), cuando el autor entró en la comisaría y le asestó varias puñaladas en sus miembros inferiores, según BFM TV.

La Gendarmería Nacional pidió en Twitter a la población que evitara la zona, en la que se desplegó un amplio dispositivo policial para localizar al agresor, con unos 240 gendarmes y dos helicópteros.

El agresor, del que todavía se desconocen sus motivaciones, huyó del lugar en coche pero se cree que prosiguió su huida a pie después de que los agentes localizaran su vehículo "accidentado".

"Me niego a que las agresiones contra los policías se vuelvan algo habitual. Hay que combatir esta barbarie y no acostumbrarse nunca, absolutamente nunca", dijo en Twitter la líder ultraderechista Marine Le Pen, la primera política en reaccionar a lo sucedido.

Los policías franceses denuncian sentirse desprotegidos ante los recientes ataques contra ellos y el pasado 19 de mayo se manifestaron para reclamar más medios y más mano firme de la Justicia en las condenas a sus agresores.

El propio Darmanin acudió a esa protesta multitudinaria en París en señal de apoyo que, según los organizadores, reunió a unas 35.000 personas y contó también con la participación de Le Pen y de otros políticos.