Después de un tenso Consejo de Ministros, en el que se anticipaban los desencuentros entre los miembros de la coalición de Gobierno, Italia ha aprobado el polémico Plan de Recuperación para el coronavirus, financiado con fondos europeos, aunque el país no ha esquivado completamente la crisis política ante las posibles dimisiones que el líder de la formación Italia Viva, Matteo Renzi, ha anunciado.

A Italia le corresponden unos 200.000 millones de euros del plan lanzado desde la UE para ayudar a los diferentes países a aliviar los efectos colaterales de la pandemia de COVID-19, al que el Gobierno ha dado luz verde finalmente este miércoles de madrugada tras meses de debates.

La prensa italiana recoge los momentos de tensión que se han vivido en el Consejo de Ministros tras la amenaza de Italia Viva, una de las formaciones de la coalición, de romper la alianza por las discrepancias con el resto de partidos de Gobierno, liderado por Giuseppe Conte y que integran también el Movimiento 5 Estrellas (M5S) y el Partido Democrático (PD).

El partido de Renzi tiene apenas un 3 por ciento en las encuestas de intención de voto, pero su apoyo es clave para que Conte conserve la actual mayoría parlamentaria. El adelanto electoral es una de las opciones que se barajan en caso de crisis, de la que también se podría salir con un nuevo Ejecutivo de Conte --sería ya el tercero tras el experimento del M5S con la Liga de Matteo Salvini-- o con un gabinete tecnócrata.

Italia Viva cuenta en la actualidad con dos ministras que finalmente se han abstenido en la votación del Plan de Recuperación, cuya continuidad en el gabinete está pendiente de que se produzca o no la ruptura definitiva de la coalición. Los medios ya especulaban con un gesto por parte de Renzi que podría llegar después del Consejo de Ministros. Y así lo ha anunciado tras la reunión, ya que ha asegurado que "por la mañana decidiremos y por la tarde lo comunicaremos a la prensa", como recoge 'La Reppublica'.

Aunque las dos ministras afines a Renzi, Teresa Bellanova y Elena Bonetti, han reconocido el "avance" que supone el texto que finalmente se ha aprobado, han indicado en la reunión que "quedan demasiados temas críticos" en un proyecto que consideran llega con "dramático retraso".

En efecto, el texto refleja algunas concesiones a Renzi, principalmente en materia sanitaria, pero Italia Viva ha visto rechazadas sus solicitudes de compartir más el poder, acelerar los proyectos de obras públicas y renunciar al control de los servicios secretos.

El proyecto final prevé, entre las diversas áreas de intervención, 46.000 millones para digitalización y cultura, casi 69.000 millones para la 'Revolución Verde', cerca de 32.000 millones para infraestructura, alrededor de 28.500 millones para educación, más de 27.500 millones para inclusión y cohesión y unos 19.700 millones para salud.

El ministro de Economía y Finanzas, Roberto Gualtieri, lo ha tildado como "el plan de inversión más grande jamás visto en Italia" a través de su cuenta de Twitter, donde también ha añadido que "con recursos europeos, nuestro país ahora puede realmente cambiar. Fue un gran trabajo, más importante que cualquier polémica. Ahora hablemos en el Parlamento y en la sociedad".