La Comisión Europea (CE) incluyó este jueves a Panamá y Panamá Nicaragua en su lista de países terceros con deficiencias en sus estrategias contra el blanqueo de dinero y la financiación del terrorismo.

Además de Panamá y Nicaragua, Bruselas añadió al listado a Bahamas, Barbados, Botsuana, Camboya, Ghana, Jamaica, Mauricio, Mongolia, Myanmar y Zimbabue.

En cualquier caso, esos países han manifestado su compromiso para implementar medidas pactadas con el Grupo de Acción Financiera Internacional (FATF, por sus siglas en inglés) que aborden sus deficiencias.

Junto a esos doce países que el Ejecutivo comunitario agregó hoy, permanecen en el repertorio Afganistán, Irak, Vanuatu, Pakistán, Siria, Trinidad y Tobago, Uganda y Yemen.

No obstante, la CE precisó que todavía está analizando la situación de Afganistán, Irak, Trinidad y Tobago o Vanuatu.

El Ejecutivo comunitario sí confirmó que han abandonado el listado Bosnia y Herzegovina, Etiopía, Guyana, República Democrática Popular de Laos, Sri Lanka y Túnez.

Nuevo intento

En febrero del año pasado, la CE ya incluyó a Panamá en una lista de países con normativas que podían facilitar el blanqueo y la financiación del terrorismo, junto a otros 22 Estados y jurisdicciones.

Sin embargo, los Estados miembros de la Unión Europea (UE) rechazaron ese repertorio al considerar que su elaboración no fue transparente y no se mantuvo la suficiente comunicación con los países incluidos.

En una declaración, los ministros de Justicia de la UE aseguraron en marzo del año pasado que no podían apoyar la propuesta porque "no fue establecida en un proceso transparente" que "incentive a los países afectados para emprender acciones decisivas, mientras se respeta también su derecho a ser escuchados".

Tras esa decisión de los Estados miembros, la Comisión Europea estaba obligada a presentar un nuevo listado y metodología para elaborarlo, algo que hizo hoy.

Aun así, la lista publicada este jueves no se basa todavía en la metodología actualizada, ya que el nuevo método exige ponerse en contacto con los países que podrían pasar a formar parte del repertorio.

Así, Bruselas explicó en un comunicado que, a falta de aplicar la nueva metodología, ha revisado su lista "teniendo en cuenta el desarrollo de los acontecimientos a nivel internacional desde 2018".

También precisó que la nueva lista está "mejor alineada" con las publicadas por el Grupo de Acción Financiera Internacional.

De acuerdo con la directiva comunitaria contra el blanqueo de dinero, la Comisión Europea está obligada a identificar "países terceros de alto riesgo con deficiencias estratégicas en sus regímenes contra el blanqueo de dinero y la financiación del terrorismo".

Los bancos y otras instituciones financieras tienen que tomar precauciones adicionales al realizar transacciones con esos países terceros.

De todas formas, la inclusión en la lista no implica la aplicación de sanciones, restricciones en las relaciones comerciales o imposibilidad de acceder a las ayudas al desarrollo.

El repertorio actualizado se enviará ahora a la Eurocámara y el Consejo de la UE (los países) para que la aprueben en el plazo de un mes, aunque es posible una extensión de otro mes más.

El listado, sin embargo, no entrará en vigor hasta el próximo 1 de octubre, para que las autoridades, empresas y otras partes interesadas tengan tiempo de preparar las precauciones adicionales en un contexto marcado por la pandemia del coronavirus.

La lista de hoy es diferente de la que elabora el Consejo de la UE sobre paraísos fiscales, en la que ahora mismo también está incluida Panamá.

Nueva metodología

En cuanto a la metodología actualizada, incluye como nuevos elementos una mayor interacción entre las listas de la UE y el FATF, más intercambios con los países terceros cuya situación se analiza antes de decidir si pasan a formar parte del repertorio y más consultas con expertos de los Estados miembros del club comunitario.

La Eurocámara y el Consejo de la UE tendrán acceso a toda la información relevante en las distintas fases del proceso.

Los países incluidos en los repertorios del FATF formarán parte, en principio, del de la Comisión, pero en el caso de las jurisdicciones que saque de su lista el Grupo de Asistencia Financiera Internacional, la Comisión realizará su propia evaluación y concluirá si pueden dejar el listado de Bruselas.

Por tanto, Bruselas también identificará otros países a partir de sus propios análisis, tras haberse puesto en contacto con ellos.

Si los países terceros tienen gran riesgo o se niegan a adoptar compromisos para resolver sus deficiencias en la lucha contra el blanqueo y la financiación del terrorismo, se incluirán en la lista de manera automática.

Las jurisdicciones que se comprometan con la CE a realizar cambios en sus legislaciones tendrán un plazo de doce meses para implementarlos y si no los han aplicado para entonces, se añadirán a la lista.