Un centenar de agentes de la Policía de Hong Kong ha entrado este jueves a primera hora en el campus de la Universidad Politécnica tras once días de encierro ante el asedio de un fuerte despliegue policial, según ha informado la cadena de televisión RTHK.

Los agentes han llegado al campus poco antes de las 8.30 (hora local) junto a una dotación del Cuerpo de Bomberos, que se ha desplazado hasta la zona para ayudar a retirar materiales peligrosos.

El jefe de operaciones de la Policía Chow Yat Ming ha indicado en una breve rueda de prensa frente al recinto universitario en Hung Hom que las prioridades son el bienestar de la gente en el campus, la retirada de objetos peligrosos y el posible hallazgo de pruebas sobre lo allí acontecido.

"Nuestra principal preocupación hoy no es arrestar, es lograr bienestar. Esa será nuestra mayor preocupación", ha señalado Chow, que ha subrayado que, "obviamente, el objetivo son los objetos que puede haber en el campus y que entrañan peligro".

"Si encontramos manifestantes o personas dentro les pediremos que busquen tratamiento médico", ha garantizado un día después de que un equipo de personas seleccionadas por la Universidad Politécnica de Hong Kong completara una primera inspección de todo el campus universitario sin encontrar en su interior a ningún estudiante.

En este sentido, ha expresado que se buscarán cócteles molotov, así como otros materiales químicos, y ha afirmado que los agentes tratarán de hacerse con el mayor número de pruebas posibles sobre la "ocupación y los daños provocados" en el campus durante las últimas dos semanas.

Wong Chun Yip, jefe del Cuerpo de Bomberos, ha sostenido que su equipo se centrará en reducir el peligro que puede suponer la "presencia de una gran cantidad de químicos peligrosos" en el campus.

"Si hay algún material químico que pueda provocar daños inminentes o si hay alguna fuga de químicos, tomaremos medidas de forma inmediata para mitigar los posibles daños", ha expresado.

El campus universitario situado en la península de Kowloon se convirtió en una zona de enfrentamientos con las fuerzas de seguridad desde que los manifestantes decidieron atrincherarse en el recinto académico tras los choques con agentes antidisturbios de la Policía en el marco de unas protestas que comenzaron hace ya cinco meses.

La semana pasada, la Policía detuvo a unas 1.100 personas en el entorno del centro universitario, algunas de ellas cuando intentaban escapar del cerco policial.

La Universidad Politécnica es el último de los cinco recintos universitarios ocupados por manifestantes en un intento por bloquear la ciudad de Hong Kong, impidiendo el paso por el túnel portuario que une Kowloon con la isla de Hong Kong y con otras zonas.

Tras las elecciones locales del fin de semana, en las que se impusieron los candidatos prodemocracia, las autoridades chinas han subrayado la necesidad de "detener la violencia y restablecer el orden" en Hong Kong.