La guerra entre la Casa Blanca y el Congreso se ha caldeado aún más con las acusaciones del presidente Donald Trump de que los demócratas buscan un "golpe" contra su Gobierno con la apertura de un juicio político, que calificó como "el mayor fraude en la historia".

"Esto es un delito fraudulento contra el pueblo de EE.UU.", afirmó Trump este miércoles, en tono beligerante, en una rueda de prensa con motivo de la visita de su homólogo finlandés, Sauli Niinistö. "Es el mayor fraude en la historia", remarcó.

La comparecencia del mandatario en la Casa Blanca estuvo repleta de ataques a los medios de comunicación, que tachó de "corruptos", mientras Niinistö trataba de mantenerse estoicamente en silencio.

En uno de los intercambios con los periodistas, Trump llegó a exigir a un reportero que dejase de preguntarle a él y que lo hiciese al presidente finlandés.

Anteriormente, el presidente se había quejado en un tuit de la actuación de los demócratas al afirmar que "a medida que me entero de más cosas cada día estoy llegando a la conclusión de que lo que está en marcha no es un juicio político, es un GOLPE".

Por su parte, los líderes demócratas del Congreso reafirmaron su intención de avanzar con celeridad en la apertura de un proceso de destitución dada la gravedad de las acusaciones y criticaron las maniobras del secretario de Estado, Mike Pompeo, para intentar obstruir la investigación.

La líder demócrata, Nancy Pelosi, anunció el pasado martes una investigación de juicio político a Trump después de que se filtrara el contenido de una conversación telefónica que sostuvo en julio con su homólogo ucraniano, Vladímir Zelenski, en la que le pidió investigar al exvicepresidente Joe Biden, uno de los aspirantes a la candidatura presidencial demócrata en 2020, y a su hijo por presunta corrupción en ese país.

Asimismo, se ha sabido que Trump había bloqueado una ayuda militar a Kiev de unos 400 millones de dólares hasta semanas después de su llamada con Zelenski, a pesar de que había sido aprobada por el Congreso.

El terremoto político que vive EE.UU. los últimos días fue desencadenado por una queja interna presentada en agosto por un supuesto agente de CIA por la conversación entre Trump y Zelenski.

Según los documentos desvelados, el espía advertía "de que el presidente está utilizando el poder de su cargo para solicitar la interferencia de un país extranjero en las elecciones estadounidenses de 2020".

Biden ha alertado este miércoles al dirigente norteamericano, Donald Trump, de que "no va a destruirle", ni a él ni a su familia.

"Dejaré algo claro a Trump y a aquellos interesados en apoyar ataques en mi contra. (...) No me iré a ninguna parte. No vas a destruirme. Ni a mí ni a mi familia. Me da igual cuánto dinero inviertas o cuán sucios sean los ataques", ha afirmado.