Los afganos comenzaron a votar este sábado a primera hora de la mañana, en unas elecciones presidenciales clave para el futuro de su país, con la preocupación por la promesa de los talibanes de boicotear el proceso con violencia.

"Venid y votar", afirmó la jefa de la Comisión Electoral Independiente de Afganistán (IEC, en inglés), Hawa Alam Nuristani, en la apertura oficial de los colegios. Alam depositó simbólicamente su voto en uno de los colegios electorales de Kabul, y animó a las mujeres a votar.

Unos 9,6 millones de ciudadanos de Afganistán, un 34,5 % de ellos mujeres, están llamados a acercarse a alguno de los 4.928 centros electorales abiertos desde las 7.00 hora local (02.30 GMT).

Los centros de votación permanecerán abiertos hasta las 15.00 hora local de hoy (10.30 GMT).

Alrededor de un tercio de los colegios, de un total de 7.385 situados en las zonas bajo control del Gobierno afgano, permanecerán cerrados por problemas de transporte y de seguridad.

Seguridad

Para garantizar la seguridad a pie de urna, Afganistán ha desplegado a 72.000 miembros de las fuerzas de seguridad y puesto en alerta a otros 30.000, según datos del Ministerio del Interior.

Quince candidatos se han presentado a estas elecciones, las cuartas desde la invasión estadounidense de 2001, entre los que destaca el actual presidente de la nación asiática, Ashraf Ghani; el jefe del Ejecutivo, Abdullah Abdullah, y el antiguo "señor de la guerra" Gulbuddin Hekmatyar.

Los comicios se celebran entre las amenazas de los talibanes de boicotear el proceso, que consideran como una farsa orquestada por Estados Unidos y han llevado a cabo varios atentados en las últimas semanas.

El pasado 17 de septiembre, por ejemplo, un atacante suicida de la formación insurgente detonó su carga explosiva en las cercanías de un mitin de Ghani en el norte del país, lo que acabó con la vida de al menos 30 personas e hirió a otras 51.

Esto comicios son vistos como un momento clave para Afganistán, ya que es posible que el nuevo gobierno deba alcanzar un acuerdo de paz con los talibanes si Estados Unidos saca a sus tropas del país.

Washington y la formación insurgente han mantenido nueve rondas de negociaciones desde hace más de un año en Catar, y ambas partes habían alcanzado un borrador de acuerdo cuando el presidente estadounidense, Donald Trump, decidió a principios de mes suspender las negociaciones.