La participación en las elecciones israelíes en lo que va de día supera las expectativas y se mantiene dos puntos por encima de la que se alcanzó el pasado abril, pese a las previsiones de abstención, en una jornada festiva y tranquila que transcurre sin apenas incidentes.

Un 26,8 % de votantes cumplieron su deber en las cuatro primeras horas de apertura de urnas, una cifra que supera las de las últimas siete citas electorales y que no impidió que los principales líderes siguieran instando a la población a votar.

En las redes sociales y en vídeos o mítines improvisados en lugares públicos, el primer ministro en funciones, Benjamín Netanyahu, advertía de que se está registrando una alta participación en comunidades árabes y de izquierdas, frente a una baja en los feudos de su partido, el Likud.

Yair Lapid, del partido opositor Azul y Blanco, paseó por las playas de Tel Aviv para pedir los últimos votos a los bañistas que disfrutaban del buen tiempo e instó a sus seguidores a votar ya que Bibi (Netanyahu) "está sacando a los suyos de casa".

En Jerusalén, Adina Messing, joven enfermera y madre ortodoxa de 25 años, votó acompañada de su marido y sus dos hijos en un colegio de Rejavia a la alianza de derechas Yamina, con la esperanza de que el bloque de partidos derechista y religioso pueda formar coalición y mantener a Bibi en el poder.

"Espero que salga algo bueno de estas elecciones y que no estemos otra vez aquí en pocos meses", diojo a Efe, envuelta en un pañuelo colorido en la cabeza y sosteniendo entre sus manos a un bebé de pocos meses.

Y explicó que apuesta por la formación ultranacionalista y religiosa liderada por Ayelet Shaked para apoyar el crecimiento de Israel "como país judío" y "construir un buen futuro".

En el lado contrario del mismo colegio electoral estaba el jubilado Amnón Ramón, de 85 años, quien espera que "se pueda cambiar al primer ministro y el partido que gobierna" en esta segunda cita electoral.

A su entender, el país debe realizar "unos cuantos cambios que son muy necesarios" para volver "a las buenas maneras del pasado". Se necesita, asegura, "más igualdad, así como escuchar y tener en cuenta a más gente de alrededor", una habilidad que cree se ha erosionado tras diez años de gobierno de Netanyahu.

En Tel Aviv, de tradición progresista y laica, el ambiente festivo del día electoral llenó de gente las calles, parques, cafés y playas.

Eitan Bronstein, votante de mediana edad, aseguró a Efe que boicoteará los comicios al estar en contra "de las políticas racistas y de apartheid" que considera que Israel aplica a los palestinos.

Por su parte, el ortodoxo israelí Yuval Pery se mostró entusiasmado en Tel Aviv ante lo que definió como "una elección muy reñida".

"Uso mi poder de voto y le rezo a Dios para que todo salga bien. Creo que el principal tema de esta elección es entre los religiosos y los antirreligiosos, y por eso es tan importante votar", declaró a EFE.

Estos son los principales partidos que optan a obtener representación:

Estos son los principales partidos que optan a obtener representación:- Likud: derechista, liderado por Benjamín Netanyahu.

- Azul y Blanco (Kajol Lavan): principal coalición opositora, formada en febrero por la unión de tres partidos y liderada por el exjefe del Estado Mayor Beni Gantz.

- Lista Unida: unión de cuatro partidos que representan a los ciudadanos árabe israelíes.

- Israel Nuestro Hogar (Israel Beiteinu): partido de Avigdor Lieberman, secular y ultraderechista, potencialmente clave en la formación de gobierno.

- Yamina: unión de partidos de ultraderecha liderada por Ayelet Shaked (exministra de Justicia).

- Judaísmo de la Torá (Yahadut HaTora HaMeuhedet): judíos ultraortodoxos ashkenazíes (de origen europeo), liderados por el rabino Yaakov Litzman.

- Shas: judíos ultraortodoxos mizrahíes (de Oriente Medio y norte de África), liderados por el rabino Arie Deri.

- Laborismo-Guesher: alizana entre el histórico partido socialista con una fuerza de centro derecha pero con compromiso social.

- Unión Democrática: alianza de partidos de izquierda y centro izquierda, liderada por Nitzán Horowitz, del pacifista Meretz.

- Poder Judío (Otzmá Yehudit): es el partido más extremista que participa en la elección. Su líder es Itamar Ben Gvir.