La ola de calor que desde hace días azota a Marruecos y al sur de Europa ha tenido graves consecuencias en el sector avícola del país magrebí, ya que el 20% de la cabaña de pollos y gallinas ha muerto por culpa de las altas temperaturas.
El presidente de la Asociación Marroquí de Avicultores, Jaber Abu Bakr, indicó que esa cifra la cifra podría revisarse al alza, con la continuidad al menos durante el día de hoy de temperaturas excepcionalmente altas, según publica hoy el diario Le Matin.
Esta ola de calor se siente en todo el país, pero es especialmente extrema en las poblaciones del interior de la vasta planicie que va de Casablanca a Marrakech, donde se concentra una buena parte del ganado avícola, especialmente el dedicado a la producción cárnica.
Por el momento, esta circunstancia no ha afectado mayormente al mercado cárnico, ya que la oferta suele ser siempre superior a la demanda.
En 2004 se produjo una verdadera catástrofe en el sector por otra ola de calor similar, que costó la vida a la mitad de la cabaña avícola en todo el país.