Luis Martínez-Abarca, Director del Área de Colegios CEU: 'La individualización en las aulas nos permite detectar el talento de nuestros alumnos y explotarlo' :: Prensa Ibérica para CEU

Luis Martínez-Abarca, Director del Área de Colegios CEU:
"La individualización en las aulas nos permite detectar el talento de nuestros alumnos y explotarlo"

Los nuevos modelos didácticos y pedagógicos fomentan la participación, la autonomía y el aprendizaje a partir del error para impulsar la creatividad y el talento


Decía Albert Einstein que “Todos somos unos genios. Pero si juzgamos a un pez por su capacidad para trepar un árbol, pasará toda su vida creyendo que es un estúpido”. Esta maravillosa frase nos hace pensar en la tendencia a homogeneizar, sin fijarse en las habilidades de cada uno. Parece que todos los niños debieran ser buenos en lo mismo, pero lo cierto es que hay que desterrar esta idea y ayudar a los hijos a descubrir y desarrollar sus propios talentos. Se trata de una tarea en la que padres, madres y docentes deben ser aliados y trabajar juntos en una misma dirección, como ha subrayado Luis Martínez-Abarca, Director del Área de Colegios CEU, en el evento online “La educación importa para… potenciar el talento de nuestros hijos”.

Nuevo enfoque en la enseñanza

Luis Martínez-Abarca, Director del Área de Colegios CEU. “Es cierto que los modelos educativos actuales y las ratios con los que trabajamos en las aulas no nos lo ponen demasiado fácil. Hay cierta tendencia a facilitar la gestión del grupo por medio de la estandarización intentando centrar sobre todo los procesos en la enseñanza y los contenidos. Pero también es cierto que desde hace años estamos trabajando en una renovación didáctica y pedagógica que nos permite desarrollar la autonomía de los grupos y de los alumnos individualmente y liberar al docente para actividades de mayor rango. Yo suelo hacer un paralelismo con el modelo de liderazgo del directivo cuya primera función es detectar y explotar el talento con el que trabaja. La misión del profesor en el aula es exactamente la misma”, explica el responsable de coordinar la actividad de los diez Colegios CEU repartidos por el territorio nacional.

“Esta individualización -continúa- nos permite ir detectando el talento de nuestros alumnos y explotarlo, que es la clave. Generamos actividades diversas a través de modelos ABP (Aprendizaje Basado en Proyectos) o las clases invertidas, que hacen posible trabajar diversos aspectos de la inteligencia de los alumnos y ponerlos en valor en el aula”.

¿Mata la escuela la creatividad?

Porque como señalaba hace años el educador y académico británico Ken Robinson en su charla TED “¿Mata la escuela la creatividad?” debemos “ver en nuestros niños la promesa que son” y esto solo es posible con un sistema educativo que fomente la creatividad en vez de minarla. En este sentido Martínez-Abarca cree que “la masificación y la estandarización, sobre todo en modelos del siglo pasado, era muy frecuente. Estaban muy orientados al pensamiento convergente, a la utilización del hemisferio izquierdo del cerebro y en ese sentido, sí, claramente mataban la creatividad. Pero los nuevos modelos didácticos plantean recursos diferentes, lo que enriquece muchísimo el aprendizaje y da muchas posibilidades a los alumnos”

El error como parte del aprendizaje

Además, para el desarrollo de la creatividad es clave otro factor, “la cultura del error”, resalta Luis Martínez-Abarca. Los niños se arriesgan; si algo no saben, le buscan una salida. No les asusta equivocarse. Pero, como Ken Robinson enunciaba en su conocida charla y el Director del Área de Colegios CEU ratifica, “los sistemas educativos tradicionales estigmatizan el error y, para cuando llegan a adultos, los niños han adquirido el miedo a equivocarse y han perdido la capacidad de ser creativos”.

Para evitar que esto suceda, en los colegios CEU han puesto en marcha programas específicos, como “Regálame tu error”, un espacio en el que tanto profesores como alumnos comparten “en confianza” sus experiencias, proyectos, cosas que no funcionan… “Se trata de convertir el error en algo constructivo y así favorecer la creatividad, el riesgo, el atreverse”, señala el docente.

Alumnos “enormemente motivados”

En una sociedad en el que todo va muy rápido y muchas cosas se consiguen con un solo clic, en los centros CEU también se trabaja “el valor del esfuerzo y la paciencia”: “Es muy importante enseñar a los niños, desde edades muy tempranas, que hay momentos de tiempo lento y momentos de tiempo rápido y el que haya una combinación adecuada de este tipo de tiempos favorece que poco a poco desarrollen la paciencia para determinadas actividades, aquellas que entrañan reflexión y que hacen posible el pensamiento analítico, el pensamiento crítico y las funciones ejecutivas”.

La combinación de todos estos recursos y estrategias en los nuevos modelos educativos, con metodologías activas de enseñanza que convierten al alumno en protagonista de su propio aprendizaje, es la mejor forma de despertar la motivación en las aulas. “Los alumnos no están motivados en un modelo educativo donde no tienen capacidad para desarrollar sus potenciales, pero cuando generamos un clima adecuado los alumnos están enormemente motivados”, destaca Martínez-Abarca. “Da gusto entrar en un colegio y ver la actividad, los alumnos protagonistas y su autonomía”, recalca.

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