El vicepresidente tercero del Cabildo de Tenerife, José Antonio Valbuena, avanzó ayer a EL DÍA que la Corporación insular quiere "tener un verdadero cuerpo de bomberos forestales permanente, igual que los hay en zonas urbanas. Los estudios están en una fase muy incipiente y la intención es poder disponer de un cuerpo de bomberos forestales".

"No es un asunto sencillo, ya que hay que incrementar la plantilla, reorganizar el personal y la idea es que tenemos que dotarnos de este cuerpo y existe esa necesidad", manifestó Valbuena.

El también consejero insular de Sostenibilidad, Medio Ambiente, Aguas y Seguridad apuntó que el Cabildo está trabajando "en el rediseño de las cuadrillas de incendios forestales, teniendo presente que las condiciones climatológicas y que el cambio climático es una realidad, y ahora estamos teniendo conatos de incendios en épocas que no son normales como el otoño o el invierno. Estamos analizando un sistema que nos permita tener una presencia activa los 365 días del año las 24 horas al día. Fuera de la temporada de incendios, normalmente quien atiende las emergencias por las noche son los bomberos. La idea es que lo hagan las brigadas forestales y, para eso, se está estudiando la fórmula a adaptar".

El consejero anunció que el operativo contraincendios forestales empezará el próximo 15 de junio, y permanecerá hasta mediados de octubre. "Lo que sucede es que las condiciones climatológicas de los últimos años están siendo un tanto extrañas. Este año ha sido un ejercicio más seco que el pasado, especialmente en otoño e invierno y eso hace que tengamos que extremar las precauciones", destacó.

"La idea en esta campaña es tener el mismo personal tanto aéreo como terrestre. El Cabildo contrata un helicóptero adicional para la campaña de verano, que todos los días hace un vuelo preventivo, y que además colabora en tareas de prácticas y actúa en los conatos. También están los medios del Gobierno de Canarias y los del Estado. En principio es suficiente para poder cubrir las necesidades en Tenerife. El problema radica cuando tenemos conatos en distintas islas como sucedió en 2012. Ahí hay que priorizar".

El Operativo Brifor dispuso el verano pasado de 295 trabajadores, distribuidos en coordinación y vigilancia, extinción y apoyo. El fuego afectó a 33 hectáreas.