El vicepresidente del Cabildo de Tenerife, José Manuel Bermúdez, aseguró hoy que la parte sanitaria de los futuros hospitales del norte y sur de la isla tendrán gestión pública, después de que el PSOE dudara de que pudiera ser privada.
"Siempre se ha hablado de hospitales públicos gestionados directamente por el Servicio Canario de Salud", afirmó Bermúdez, quien informó en rueda de prensa de que, sin embargo, la parte sociosanitaria de los hospitales podría ser de gestión privada.
El vicepresidente hizo hincapié en que la parte sanitaria tendrá "una gestión pública pura y dura", al tiempo que hizo referencia a las declaraciones del consejero regional de Sanidad, Fernando Bañolas, quien indicó ayer que ambos centros hospitalarios estarán abiertos en 2012.
Pese a ser un momento de recortes presupuestario, Bermúdez se mostró confiado por que el Gobierno de Canarias de el dinero para estas nuevas infraestructuras, cuya parte inacabada aseguró que se adjudicará en pocas semanas.
La hemeroteca, las declaraciones del consejero y la tramitación actual de un expediente atestiguan que las obras podrán contar con el dinero por parte del Gobierno regional para poder terminarse, indicó.
En su opinión es compatible y factible poner la parte sociosanitaria en funcionamiento y, al mismo tiempo, terminar la sanitaria.
Respecto a la parte sociosanitaria, el vicepresidente dijo que se baraja que su gestión pueda ser indirecta tal y como ocurre actualmente con el Hospital Militar de Santa Cruz.
A su juicio, "no parece lógico" que se abran los dos hospitales con personal funcionario, aunque aún no se ha tomado ninguna decisión en firme.
El candidato del PSOE para el Cabildo de Tenerife, Aurelio Abreu, y la consejera socialista, Ana Lupe Mora, reclamaron ayer al grupo de gobierno de la Corporación insular que informaran cuál va a ser el modelo de gestión de hospitales, que sospechaban que podría ser privada.
A este respecto Bermúdez denunció que las declaraciones de los socialistas son "tendenciosas", ya que, en su opinión, "no saben afrontar unas elecciones sin falsear la realidad".