El deterioro y abandono que han venido sufriendo las instalaciones del Parque Marítimo César Manrique en el último año y medio han tenido su punto álgido en los últimos días, en que la apertura de las puertas en la mayoría de sus dependencias ha facilitado todo tipo de destrozos y sustracciones.

El recinto de ocio de la capital presentaban ayer una imagen caótica, con muchos elementos de su interior literalmente destrozados, con las cristaleras, mobiliario o material de oficina hechos añicos.

Salvo dos o tres habitáculos del Parque que aún permanecían cerrados, el resto de las dependencias estaban destrozadas por completo, con máquinas expendedoras literalmente reventadas y por los suelos; cabinas de teléfono inservibles tras ser descolgadas de la pared y todo tipo de aparatos resquebrajados en mil pedazos. No se ha salvado de este último asalto ni el botiquín, cuyos utensilios aparecían esparcidos por las instalaciones. Tampoco las zonas de restauración, con las cocinas desvalijadas, con algunos electrodomésticos reventados o la cubertería esparcida por todos los rincones.

Esta huella del destrozo se mezcla con la basura que se ha ido amontonado, así como con la imagen de las piscinas, que no cesan en su deterioro, todo por una espera a lo largo de los meses a que se dilucide el proceso judicial abierto entre la concesionaria, Parque Marítimo S.A., gestionada al 50% por el Ayuntamiento de Santa Cruz y la Autoridad Portuaria, y la arrendataria del recinto, Santa Cruz Park Tenerife S.L.

Dado el calibre de los destrozos sufridos esta semana, la propia concesionaria ha presentado en el día de ayer sendas denuncias en el juzgado de guardia y ante la Policía Local, ya que según el secretario de la sociedad, Pedro Doblado Claveríe, "se trata de actos de una extrema gravedad".

Este tipo de acontecimientos coincide con una de las escasas novedades sobre este controvertido conflicto, ya que según Claveríe, el pasado día 25 de dictó por parte del juzgado que instruye este proceso una orden de lanzamiento de Santa Cruz Park Tenerife S.L. del recinto, aunque la fecha no se ha fijado por el momento, puesto que, según el secretario, depende del Servicio Permanente de Desahucios y Notificaciones para que fije el día. No obstante, Doblado comentó que se estima que el desahucio se fijará, con toda probabilidad, en torno al 15 de febrero.

Sin embargo, consideró que el aspecto "más grave" de todo este asunto, es que, "al parecer, el inquilino del Parque Marítimo, al tener noticias de esta decisión, ha abandonado el recinto", favoreciendo, según él, "el saqueo, por lo que se ha dado conocimiento a la policía y la pertinente denuncia en los juzgados, y ahora estamos pendientes de otras intervenciones ante los actos de determinadas turbas".

Así, señaló que "la situación es gravísima y catastrófica, y desborda todas las capacidades si no se aplica una disciplina".

Si bien no apunta a una responsabilidad directa del arrendatario de los daños ocasionados en el Parque Marítimo en los últimos días, señaló que "alguna responsabilidad habrá, porque tiene el deber de custodia y mantenimiento hasta el momento en que abandone por decisión judicial las instalaciones, que son propiedad de la sociedad".

Por su parte, el representante legal de Santa Cruz Park Tenerife, Juan Jesús Cabrera, señaló ayer que su empresa había presentado una denuncia, porque se había detectado la presencia de agentes de la Policía Local en el interior del recinto, sin una orden judicial. El letrado comentó que a consecuencia de los daños ejercidos en esta propiedad también se ha intentado en varias ocasiones denunciar esta situación, pero precisó que Santa Cruz Park está sometida a un proceso concursal y que todas las acciones hay que canalizarlas a través del administrador judicial.

En cuanto al desahucio, señaló que la decisión del juzgado es ejecutable, pero precisó que "aún no hay una fecha determinada", y advirtió que "aún hay recursos pendientes de resolución, que puedan dar un giro a los acontecimientos".