La Audiencia Provincial condenó a 10 años de prisión a un hombre por intentar matar a su expareja asestándole tres puñaladas en el cuello cuando la abordó mientras iba andando sola a casa por una zona de bares del barrio madrileño de Lavapiés en abril del año pasado. Según la sentencia, la Audiencia condena a Miguel Ángel D.B., de 63 años, por un delito de asesinato en grado de tentativa a diez años de prisión, además de imponerle una orden de alejamiento durante quince años y el pago de 25.200 euros a la víctima, que tiene 49 años de edad.

Los hechos ocurrieron el 8 de abril de 2017 sobre las diez menos cuarto de la noche, cuando Miguel Ángel se dirigió a una zona de bares de Lavapiés que sabía que su expareja frecuentaba y, cuando la localizó, la sujetó e inmovilizó sorprendiéndole por detrás. Acto seguido, "con ánimo de acabar con su vida", Miguel Ángel asestó tres puñaladas a su víctima en el cuello con un cuchillo de cocina de 11 centímetros de hoja, sin que esta pudiera "reaccionar ni defenderse" y no se detuvo hasta que varias personas que estaban por la zona intervinieron, arrebatándole el arma y reteniéndole hasta que llegó la Policía. Considera el tribunal que la intención de Miguel Ángel era acabar con la vida de su exnovia y no el de causarle una lesión como sostenía su defensa por el tipo de arma empleada, por la zona vital afectada y porque "si sólo le asestó tres cuchilladas fue por la rápida intervención de los testigos". Añade que la víctima de, no recibir asistencia médico inmediata, habría muerto, aunque ahora debido a las lesiones sufre un "perjuicio estético moderado" por las tres cicatrices que le han quedado.