La localidad alavesa de Llodio ha despedido esta tarde a sus vecinos, Gabino y Mercedes García, padre e hija, que fallecieron el domingo después de ser apuñalados en la playa Salvé de Laredo (Cantabria), donde la familia veraneaba desde hacía años. El local de los Testigos de Jehová, fe que profesaban las víctimas, se quedó pequeño para acoger a los llodianos que dieron su último adiós a las víctimas y mostrar su respeto a la madre y viuda y a los otros dos hijos del matrimonio: una hermana gemela de Mercedes y un chico.