El atleta sudafricano Oscar Pistorius, acusado del asesinato de su novia, la modelo Reeva Steenkamp, podría conocer hoy, tras cuatro aplazamientos, si el Tribunal de la Magistratura de Pretoria le concede libertad bajo fianza.

Varios seguidores de Pistorius acudieron hoy a las puertas del tribunal con pancartas de apoyo en las que se podía leer "Oscar, confiamos en ti y en tu amor por Reeva".

Se espera que en la vista de hoy, que comienza a las 10.00 hora local (08.00 GMT), el tribunal se pronuncie respecto a la concesión de libertad bajo fianza al atleta, quien pasó ayer su octava noche bajo custodia policial.

La vista de ayer estuvo marcada por el relevo del jefe policial de la investigación, Hilton Botha, puesto que tiene pendientes siete cargos de intento de asesinato.

Botha declaró como testigo de la acusación contra Pistorius.

Según el portavoz de la región sudafricana de Gauteng (en la que se encuentran Johannesburgo y Pretoria), Neville Malila, Botha disparó contra un minibús que transportaba siete viajeros para tratar de detenerlo.

Tras retirar a Botha del caso del atleta sudafricano, la comisaria de la Policía Nacional Riah Phiyega anunció el nombre del nuevo jefe de las investigaciones, el teniente general Vineshkumar Moonoo.

En la jornada de ayer, el fiscal, Gerrie Nel, que acusa a Pistorius de "asesinato premeditado", volvió a invocar el riesgo de fuga del velocista como argumento para que se le niegue la libertad bajo fianza mientras se prepara el juicio e insistió en su supuesto "carácter violento".

Nel hizo referencia a tres incidentes del atleta en el pasado, en los que habría amenazado a otras personas con frases como "te voy a romper las piernas".

La defensa las descartó como prueba de la supuesta peligrosidad de Pistorius, al considerarlas expresiones comunes que "no es probable" que se cumplan literalmente.

Además, el letrado de Pistorius, Barry Roux, argumentó de nuevo que su cliente disparó a través de la puerta cerrada del baño donde murió su novia, la modelo Reeva Steenkamp, pensando que lo hacía contra un ladrón.

El corredor hizo historia el pasado agosto en Londres al convertirse en el primer atleta con las dos piernas amputadas en participar en unos Juegos Olímpicos.