El Sindicato Unificado de Policía (SUP) ha pedido hoy que "caiga todo el peso de la ley" sobre los dos policías nacionales detenidos por el atropello de una ciclista alemana en Mallorca que, sin estar de servicio, viajaban en un coche oficial conducido por uno de los agentes que dio positivo en alcoholemia.

En un comunicado, este sindicato, mayoritario en el cuerpo, califica de "miserable" el comportamiento de los agentes que ayer arrollaron en una carretera de Mallorca a una ciclista alemana de 64 años dándose a la fuga.

El SUP asegura que este hecho no puede quedarse solo en la responsabilidad de los agentes, uno de la escala ejecutiva y otro de la básica, sino que se deben depurar responsabilidades en sus superiores.

El sindicato señala que desde hace dos fines de semana la Dirección General de la Policía ha dado instrucciones para que los vehículos del cuerpo sean controlados cuando no se usen para servicios oficiales, ya que se han venido utilizando por mandos para su uso particular, en fines de semana, vacaciones e incluso cargando al cuerpo el gasto en combustible.

Por ello, el SUP pide a la Dirección General que abra una investigación interna, a fin de conocer si los dos policías detenidos están implicados en otros sucesos anteriormente y si existen responsabilidades de sus mandos directos por no haber adoptado las medidas correctoras precisas.

La Jefatura Superior de Policía de Baleares ha anunciado hoy la apertura de una "información reservada" para investigar el suceso.

El conductor del vehículo está acusado de causar la muerte de la ciclista mientras conducía bajo los efectos de bebidas alcohólicas, así como de un delito de omisión del deber de socorro, ya que huyó del lugar de los hechos sin intentar ayudar a la víctima, mientras el policía que le acompañaba ha sido detenido por el mismo delito de omisión del deber de socorro.