El 8 por ciento de la población española mayor de 65 años recibe ayudas para la dependencia, lo que sitúa al país por debajo de la media de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (un 11,4%) y de países como Suiza, Holanda, Noruega o Suecia (entre un 16 y un 20 por ciento).

Estos datos proceden del primer informe del nuevo Observatorio anual del Sistema de Atención a la Dependencia de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), elaborado por Sergi Jiménez, Cristina Vilaplana y Analía Viola.

Los autores de la investigación consideran que el sistema de atención a la dependencia está en riesgo de "languidecer" como consecuencia de la crisis de la economía española y los recortes aplicados en 2012 y 2013.