Doce años después de la compra por parte del Cabildo del teatro Baudet, la realidad de este emblemático edificio es que ha pasado a engrosar esa lista del patrimonio de Santa Cruz sumergida en el abandono y deterioro.

Quienes han tenido la oportunidad de visitarlo en las escasas ocasiones en las que se han abierto sus herméticas puertas, para intentar la inútil misión de frenar el dominio que tienen sobre el inmueble las palomas, describen una imagen bien diferente a la de sus tiempos de esplendor, donde parte del techo ha sucumbido al paso del tiempo, y los puntales ejercen un papel paliativo contra las consecuencias de una gestión que no ha sabido plasmar los proyectos para su rehabilitación.

La última reunión que se celebró entre los responsables del Cabildo, Gobierno de Canarias y Ayuntamiento de Santa Cruz para abordar la propuesta que había puesto sobre la mesa la Sociedad General de Autores (SGAE) para convertir este edificio, junto a la cercana fábrica de tabacos de la avenida de Canarias, para convertirlo en un espacio multifuncional solo constató la falta de iniciativa de las instituciones.

Deterioro imparable

Mientras, el edificio ha continuado su imparable deterioro, de cuyo estado fue testigo el artista canario y directivo de la SGAE Caco Senante, quien recuerda que el papel de esta entidad responde al llamamiento que hizo el Cabildo para que participara a través del proyecto Arteria. Senante señaló que el Baudet "es un teatro peculiar, ya que al carecer de fondo de escenario precisaba para su viabilidad que se incluyera dentro de un complejo global, junto a la fábrica de tabacos y el cinema Victoria, hoy convertido en unos aparcamientos, para hacer un centro cultural y facilitar un acceso a través de la Rambla".

Sin embargo, el impulso a este complejo cultural, que contemplaba en su idea original destinar la antigua fábrica a espacio para la danza, requería de la participación del Cabildo, como propietario del Baudet, "y determinar quién se podría interesar por comprar el resto, que podría ser el Gobierno, además de la implicación del Ayuntamiento de Santa Cruz, puesto que en la fábrica se podía incrementar una planta más, al margen de una entidad financiera". El papel de la SGAE estaría relacionado con la rehabilitación y la gestión por un tiempo determinado, como ha hecho en otras ciudades, como Bilbao o Barcelona.

Sin embargo, Senante dijo que esa fue la propuesta que se formuló a las administraciones para que se pusieran de acuerdo, pero recordó que además de que el teatro estaba muy deteriorado, "también se nos facilitó información muy confusa, porque algunos de los pisos del edificio seguían habitados, y era necesario para ejecutar nuestro proyecto que estuviera despejado".

El responsable de la SGAE señaló que la influencia de este complejo abarcaba incluso el cercano parque Viera y Clavijo, cerrado por unas interminables obras, a lo que se unía una serie de requisitos que se reflejaron en un estudio que determinaba que el entorno era ideal para una infraestructura de estas características, "pero eso era una decisión de las administraciones, que desde hace dos años no han dado ninguna respuesta ni han propiciado ningún acercamiento".

Con anterioridad a este proyecto, la SGAE barajó otras propuestas para implantar una iniciativa con la que dar respuesta a las demandas de los artistas canarios, como el Instituto Ireneo González, que "nos permitía una acción a menor escala", aunque matizó que "simultáneamente salió lo del centro multifuncional de Las Palmas, que es lo que se ha impulsado, y que incluso se inaugurará en unos meses".

Escaso interés

Caco Senante aseguró que la SGAE nunca ha dejado a un lado la posibilidad de hacer algo en Tenerife, "pero nunca ha habido un interés por ello, y los responsables públicos no han sido capaces de conversarlo".

Reconoció que en la voluntad de los autores canarios siempre ha estado contar con algún referente en las Islas, "a pesar de las dificultades que implica poner de acuerdo a todas las patas implicadas", por lo que no descartó que la SGAE "vuelva a intentar impulsar de nuevo ese espacio multifuncional, que engloba a estos tres elementos del patrimonio de la ciudad", pues, según Senante, "no solo se recuperaría el teatro, sino que al lado se podría destinar a danza y dedicar otra zona a museo de pintores canarios, para lo que ya se había contactado con algunas colecciones, para cumplimentar este proyecto ambicioso, pero bonito".

El artista canario describe un panorama cultural en la capital tinerfeña "poco halagüeño", con elementos como el teatro Guimerá que, "por la majadería de la gente", ha ido frenando su actividad. En este sentido, recordó que cuando se habló de la posibilidad de su cierre, "se le hizo una oferta al ayuntamiento, para ayudar en la programación para que entrara en al red Artería, pero nos respondieron con mucha cautela, cuando lo que queríamos era echar una mano y parecía que actuaban como si quisiéramos quedarnos con todo".

Así, el dirigente de la SGAE remarcó: "No nos respondieron, que cada cual que aguante su vela", ya que dijo que en materia de cultura se pierde protagonismo y posibilidades de futuro, porque esta área "siempre es la última y la primera a la hora de aplicar los recortes".