Habrá moción de censura. José María de Vargas lo tenía decidido antes de la asamblea y el miércoles CC, con el apoyo del PSC, volverá a gobernar Los Llanos de Aridane. José María Armas recibirá el bastón de mando de manos de la popular Noelia García, que en 2011 se hizo cargo del destino de su municipio. El caso "Marín" obligó al número uno de CC a dar un paso al costado.

De Vargas reunió a los afiliados para contarles la moción de censura y el acuerdo con los nacionalistas. Se reafirmó en su creencia de que el cambio es lo más conveniente para los ciudadanos llanenses. No había marcha atrás. Tampoco dio ninguna opción. Pese a que hubo afiliados que aprovecharon el encuentro para expresar su disconformidad, en la asamblea no se llegó a votar. Para ser realistas, los opositores no eran mayoría o, al menos, fueron más los que con su silencio aceptaron las decisiones de su líder.

Hubo quien incluso abandonó la sala tras entender que romper el pacto con el PP para unirse con CC era "autodestructivo". Amenazó con darse de baja en su formación política. No será el primero, otros ya lo hicieron tras conocer los cambios en el ayuntamiento, ni seguramente será el último. Otro de los afiliados advirtió a José María de Vargas de la forma de hacer política de Coalición Canaria, entendiendo que en seis meses "nos echarán del gobierno". No parece una estrategia política lógica, ya que sería quedarse en minoría. Tampoco faltó quien entendió que si el pacto con los populares no iba bien, lo mejor era irse a la oposición. En el fondo, los progresistas "incómodos" tampoco adoran las políticas de los conservadores, pero es aún mayor el sentimiento de rechazo, de rechazo absoluto, a la forma de hacer de los nacionalistas. El antaño y futuro teniente de alcalde también tuvo gente que tomó la palabra en defensa de la apuesta del grupo municipal. Unos por convicciones propias y otros, además, por estar ligados a puestos del Gobierno de Canarias. Ya se sabe que desde el "exterior", el PSC mandó el mensaje de que al PP "ni agua".