La empresa que gestionaba hasta la intervención del Cabildo de La Palma el centro para personas con discapacidad intelectual en Triana, Servicio Canario para la Dependencia (Sercade), rechaza las acusaciones que se vierten sobre su trabajador y exdirector del servicio, José Mustafá, calificando las mismas de "falacia".

EL DÍA contacto ayer con el responsable de la empresa en Canarias, Javier Mijangos, quien no mostró mucho interés por exponer la opinión de la empresa: "¿Quién le ha dado mi teléfono? Esto no son formas...". Esa fue su primera reacción. Posteriormente, se limitó a afirmar que las denuncias sobre supuestos tratos vejatorios a residentes en Triana "no son verdad". En ningún momento puso en duda el trabajo de José Mustafá y, además, advirtió de que los servicios jurídicos de la empresa están estudiando "iniciar acciones legales contra el Cabildo de La Palma y contra la prensa", se entiende que contra aquella que ha publicado parte de las denuncias que se recogen en el informe técnico presentado ante el Ministerio Fiscal.

Mijangos conoce Triana a la perfección. No solo es uno de los responsable de Sercade en la Isla sino que, además, fue el primer director que tuvo el centro. Se encargó tanto de la fase previa antes de la apertura del servicio como de los primeros meses de funcionamiento, en los que, por cierto, no se presentaron, al menos que hayan trascendido, denuncias por supuestos malos tratos. También fue el encargado de elegir a los trabajadores con los que el recurso arrancó, aunque es cierto que la plantilla laboral ha sufrido muchos cambios desde su marcha.

Javier Mijangos contrató a José Mustafá como psicólogo y después de su marcha, decidió que era la persona más adecuada para llevar la dirección del centro.

Sercade, que en su página web destaca "el trato ético en la atención" como filosofía de la empresa, no solo lleva en La Palma el recurso de Triana sino también se hizo cargo, a través del mismo contrato, de los centros de día para personas con discapacidad intelectual de El Dorador, en la capital, y Princesa Acerina, en Los Llanos de Aridane. Lo curioso es que la empresa que ganó el concurso en la Isla se denomina Geriden, que posteriormente cambió de nombre en Canarias, donde además de en La Palma gestiona centros de atención en Fuerteventura y Lanzarote.