El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha recordado que tanto el PSOE como UPyD han llevado en sus programas la elección directa de alcaldes, una medida que el Gobierno plantea también ahora para mejorar la voluntad popular, aunque su propuesta no está cerrada.

Con estas palabras, Montoro ha replicado al "número dos" de UPyD, Carlos Martínez Gorriarán, quien en una interpelación en el pleno del Congreso ha censurado al Gobierno por plantear cambios en la legislación electoral a escasos meses de las elecciones municipales, contraviniendo las recomendaciones del Consejo de Europa.

Hoy ha sido la primera vez que el Ejecutivo -primero la vicepresidenta, Soraya Saenz de Santamaría, y después Montoro- han dado explicaciones sobre la reforma electoral, que tanto critica la oposición y que para el Gobierno es fundamental para profundizar en la democracia y en el respeto a la opinión de los ciudadanos.

De esta manera, Montoro ha insistido en que se trata de una medida que quieren discutir con todos los grupos y, de hecho, mañana, empezarán con el PSOE, porque lo que busca el Ejecutivo y el PP es reforzar la democracia en el ámbito local y obligar a que los pactos y las coaliciones sean "transparentes", ha recalcado Montoro.

Ha argumentado que el Ejecutivo no tiene una fórmula concreta para elegir a los alcaldes de manera directa y eso es precisamente lo que quiere discutir con el resto de las fuerzas parlamentarias.

Bien puede ser una segunda vuelta o dar una "prima" a quien obtenga un determinado porcentaje de votos, tal como ha señalado.

A UPyD, ha subrayado Gorriarán, le parece bien la elección a doble vuelta pero rechaza el plus a la lista más votada porque el ciudadano tiene que saber al alcalde que vota, ha señalado.

Según Gorriarán, el PP, con esta reforma sobre la mesa con las elecciones a la vuelta de la esquina, pretende "blindarse" en los ayuntamientos que tiene y ganar otros, y ha pedido expresamente al ministro que deje la reforma para la siguiente legislatura.

En cualquier caso, ha defendido cambios más ambiciosos en la ley electoral para que sea más justa y proporcional y se acabe con situaciones "tan chuscas" como que UPyD, con 1,2 millones de votos tenga menos representación institucional que otros partidos con 300.000.

Además, ha dicho que le resulta "curioso" que sea justo en los ayuntamientos, en los que la elección se acerca más a la proporcionalidad, donde el PP plantee esta reforma y, en cambio, no vea urgente hacer otras modificaciones en la política municipal, como acabar con el "excesivo" poder de los alcaldes, que genera "clientelismo y corrupción".

Cristóbal Montoro ha insistido en que al Ejecutivo sólo le mueve avanzar en el plan de regeneración democrática y quiere hacerlo desde el consenso.

"Estamos en una nueva etapa de salida de la crisis económica", una etapa que, en paralelo, debe servir para reforzar el Estado social y el Estado de derecho y por eso, entre otras medidas, el Gobierno -ha dicho Montoro- plantea cambios electorales con la pretensión de que gobierne el partido con el respaldo popular "más amplio".

Se trata -ha añadido- de que los electores se sientan representados y que los votantes no tengan la "frustración" de que una decisión tomada por la mayoría sea vulnerada por pactos "ocultos" negociados a sus espaldas.

Antes que Montoro, Soraya Saénz de Santamaría ha respondido al nuevo portavoz socialista, Antonio Hernando, en la sesión de control que el Gobierno está dispuesto a hablar y debatir cualquier medida.

También le ha recordado que en 1998 el PSOE propuso la elección directa de alcaldes a seis meses de unos comicios y que en 1984 se descolgó con una reforma electoral sin consensuar.