Cuatro personas de la misma familia, entre ellos un menor de 6 años, fallecieron ayer en la localidad de Onda (Castellón) a causa de las fuertes lluvias que se registraron en la zona, informó la Subdelegación del Gobierno en Castellón. Los hechos se produjeron sobre las 17.30 horas de ayer, cuando el coche en el que viajaba la familia pasó por una rambla y el vehículo fue arrastrado por el agua. Las víctimas son A.A.M.S., de 41 años; su hijo, A.S.M., de 6 años; su padre, M.M.G., de 81 años, y su madre, J.S.C., de 78 años de edad.
Los cuatro fallecidos se quedaron atrapados en el vehículo en el que circulaban, que quedó completamente cubierto por el agua del río Seco. El coche solo pudo ser localizado por los efectivos de bomberos que participaron en el rescate cuando bajó el nivel del agua. Los bomberos pudieron acceder hasta el coche mediante técnicas de cuerdas y de rescate en ríos.
El alcalde de Onda, Salvador Aguilella (PP), decretó tres días de luto oficial por el incidente que costó la vida a cuatro vecinos de la localidad. El marido de la fallecida y padre del menor fue informado de lo sucedido por el regente e inmediatamente después tuvo que ser atendido por un equipo de psicólogos.
La muerte de estas cuatro personas es considerado el suceso más grave con víctimas mortales a causa de las lluvias en la última década. Fue el 17 de agosto de 2010 cuando se registraron tres fallecimientos en la provincia de Córdoba como consecuencia de las fuertes lluvias. Dos de los fallecidos (un hombre y una mujer) viajaban en un todoterreno que fue arrastrado por una riada en las inmediaciones de la laguna de Zóñar, en el término municipal de Aguilar de la Frontera, y el tercero murió al desplomarse un muro en Bujalance.
Además, las fuertes lluvias caídas ayer en Castellón dejaron en Vinarós, desde las siete de la mañana y en apenas tres horas, 250 litros por metro cuadrado, lo que causó cortes en el suministro eléctrico e inundaciones generalizadas, según fuentes municipales y de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
En un balance del temporal, el alcalde de Vinarós, Juan Bautista Juan, indicó también que las precipitaciones causaron importantes daños en infraestructuras y en inmuebles, tanto públicos como privados. Los efectivos de la Policía Local y el parque de bomberos comarcal se vieron desbordados ante las numerosas llamadas de ayuda de los vecinos, por lo que unidades de bomberos de Morella y Oropesa reforzaron los servicios a lo largo del día.
La zona norte de la población fue la más afectada, ya que el agua inundó 16 apartamentos de la urbanización Azor Playa, donde el agua llegó a alcanzar un metro de altura. Centenares de garajes han quedado inundados y los coches estacionados en ellos han sufrido daños considerables y han tenido que ser retirados con grúas.
Por otra parte, la vía férrea Tortosa y L''Aldea permaneció cortada a causa de las fuertes lluvias caídas ayer en las Tierras del Ebro, así como en las comarcas del sur de Cataluña, Baix Ebre, Montsiá y Terra Alta.