La presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, puso ayer de manifiesto que no se cierra a facilitar la investidura de Artur Mas como presidente de la Generlaitat, pero le exigió que "aparque" la reivindicación de un concierto económico para Cataluña y que dé prioridad a la crisis.

Después de la reunión del martes entre Mas y el futuro presidente del grupo del PSC, Joaquim Nadal, el líder de CiU sondeó ayer la disposición del PPC ante el debate de investidura en una reunión en el Parlament que duró una hora.

A la salida, Sánchez-Camacho explicó que todavía no ha decidido su voto en el debate de investidura porque quiere escuchar antes los propósitos de Mas, pero, según apuntó, le hizo una serie de peticiones, buena parte de ellas calcadas a los compromisos de los propios convergentes.

Entre estas reclamaciones que sintonizan con el discurso de CiU figuran por ejemplo medidas de austeridad en la Administración -el PPC quiere un máximo de 11 consejerías, CiU habla también de, como mucho, 12 departamentos, frente a los 15 actuales-, la supresión del impuesto de sucesiones y donaciones, ayudas fiscales para las pymes y priorizar la salida de la crisis. Del mismo modo, Sánchez-Camacho planteó a Mas que el primer pleno de la legislatura sea una sesión extraordinaria dedicada a la crisis y le pidió impulsar una ley de presupuestos con medidas para salir del bache económico.

La presidenta del PPC reclamó a Mas que forme "el gobierno de los mejores", con las personas "más cualificadas" para ser consejeros. Precisamente, ayer uno de los nombres que más suenan para incorporarse al nuevo Gobierno de Cataluña, Josep Antoni Duran Lleida, afirmó ayer que por ahora no se ha planteado dejar su escaño en el Congreso, donde ejerce como portavoz de CiU.

Por otro lado, la coalición ICV-EUiA se mostró dispuesta a colaborar con CiU en impulsar el avance del autogobierno catalán durante la próxima legislatura y su líder, Joan Herrera, que se reunió por la tarde con Mas, dejó la puerta abierta a apoyar a la federación nacionalista "cuando llegue el momento de reclamar el concierto económico en Madrid".

Mas cerrará hoy su ronda de contactos con tres reuniones con los líderes de ERC, Joan Puigcercós, de Ciutadans, Albert Rivera, y de Solidaritat Catalana per la Independència, Joan Laporta.