El alcalde de La Laguna, Fernando Clavijo, decidió ayer rechazar la celebración de un pleno extraordinario propuesto el pasado 14 de enero por el PSC para reconocer la labor de la Policía Local. El gobierno local alega defectos de forma para tomar esta determinación, mientras que el portavoz y candidato socialista, Gustavo Matos, calificó los hechos como de "extrema gravedad, al tratarse de un hecho sin precedentes en la historia de La Laguna, pues nunca antes se le había negado a la oposición el ejercicio de este derecho".

Matos va más allá y sostiene que Clavijo podría estar cometiendo un delito de "prevaricación al dictaminar dos resoluciones distintas ante un mismo hecho jurídico, toda vez que procedió a convocar plenos en similares o peores circunstancias que las que han motivado esta convocatoria".

Por este motivo, anuncia que también ha decidido acudir a los tribunales "ante la declaración de guerra que esto supone contra el Grupo Municipal Socialista y al grave atentado que se comete contra la democracia. No nos queda más remedio que defender nuestros derechos".

El pleno solicitado incluía dos puntos: adoptar un acuerdo sobre el reconocimiento de la labor de la Policía Local y la solicitud de cese del concejal de Seguridad y Tráfico, Antonio Pérez Godiño. Para el PSC, esto prueba que estamos ante un "alcalde miedoso".

La edil de CC Blanca Pérez recalca que el pleno extraordinario no está justificado por ninguna de esas dos razones. Según señala, el reconocimiento "no tiene por qué abordarse en una sesión extraordinaria porque algo así no requiere abrir un expediente ni está sujeto a plazos, por lo que puede tratarse perfectamente en una ordinaria, mientras que la facultad de cesar o proponer concejales es exclusiva del alcalde. A su juicio, el PSC trata, "de nuevo", de politizar un asunto que sólo consiste en la normal relación entre colectivos.