El corazón del vestuario del Tenerife late al unísono. No hay ni una fisura. Todos sienten lo mismo. Desde el último jugador hasta Quique Medina están deseosos de ganar al Badalona para garantizar el pase de la eliminatoria ante todo, pero también para demostrar que la mala imagen que dieron en el campo del Centenari no fue sino un espejismo.

¿Cómo ha transcurrido la semana?

El principio fue difícil. El entreno en Barcelona fue el más duro, pero ya el miércoles los jugadores estaban más animados y, sobre todo, preparados para jugar el domingo e intentar pasar la eliminatoria.

De hecho, durante la semana han reconocido que se sienten heridos, que están picados...

Es normal. Yo también estoy picado, deseoso de que llegue el partido. Yo me pongo en su lugar y cuando te sale un partido tan feo lo que quieres es que la revancha llegue cuanto antes.

En este tipo de partidos se utiliza el tópico que dice que hacen falta 90 minutos para ganar y otros tanto para perder...

Sí. Hay que tener cabeza, saber lo que te juegas, pero siempre con la idea de ganar. Sabemos que con un empate a cero el Tenerife pasa, pero ni nos lo planteamos. No lo hemos hablado porque el Badalona te puede hacer un gol y todo cambiaría. Así que desde el primer minuto saldremos a ganar.

Decía esta semana Manuel Márquez (entrenador del Badalona) que el Tenerife no estudió bien a su equipo...

Me parece perfecto. Él dice que estábamos más pendientes del Llagostera y el Hospitalet. No se si será porque estaría aquí viéndonos. Respeto muchísimo a Manolo, es un gran entrenador y sus opiniones también.

Hay que hacer hincapié en lo que se falló en Badalona...

Lo que se hizo mal fue todo lo que es comportamiento en un terreno de juego. Todo se deriva de esa situación general en el campo. A partir de ahí creamos espacios, no llegamos cuando teníamos que hacerlo, hicieron los dos contra uno con mucha más facilidad... Y todo se dio porque en un momento determinado el equipo no estaba en el campo.

Supongo que preparar psicológicamente un "play-off" será muy distinto a hacerlo con un partido de Liga...

Sí. Es totalmente diferente porque te la juegas en pocos minutos. La Liga siempre te da una revancha, domingo tras domingo, hasta 38, pero aquí no. Pero tuvimos la suerte, gracias a la virgen de Candelaria que estuvo con nosotros en Badalona, de sacar un resultado que es maravilloso. Lo que pasa es que estamos todos dolidos por cómo se dio. No podemos esconderlo. Ahora hay que saber jugar con él, sabiendo que no te viniste con dos o tres goles en contra, sino habiendo marcado fuera de casa, que siempre es importante.

Por lo tanto, no piensan en que el 0-0 les puede valer...

No hemos hablado para nada del 0-0 en toda la semana. Solo pensamos en ganar. Y da lo mismo hacerlo 4-3 que 5-4. Tenemos que intentar marcar un gol más que el Badalona. Nos va a costar. Es un equipo que ya demostró en el partido de ida que está bien armado, que tiene velocidad... Pero si estamos bien, estoy segurísimo de que seremos capaces de ganar.

¿Espera a un Badalona muy parecido al que se vio el domingo?

Por lo que hemos visto en los vídeos, no. Con todos los entrenadores con que he hablado me han dicho que es el mejor partido que hizo en muchísimo tiempo. Nadie ha visto ese Badalona en todo el año. Por eso, lo que decía antes de estudiar a los rivales. Muchas veces lo haces, pero después o te sale muy mal como nos pasó a nosotros, que a ellos les sorprendió, o nos sorprenden a nosotros haciéndolo tan bien. Nosotros sabemos cómo juegan fuera, pero tenemos que esperar a ver cómo lo hacen.

En todo caso, la lectura es positiva. A la mejor versión del Badalona no le da para ganarle al Tenerife...

Sí. Pero tampoco te puedes fiar de eso porque fallaron muchísimos goles que si le permitimos y concedemos aquí podrían no errarlos. Lo que tenemos que hacer es no ser quien fuimos en Badalona, sino los del día del Oviedo, del Lugo, un equipo competitivo, que aprieta, va arriba, intenta hacer el mayor número de goles posible... Después el Badalona que intente contrarrestarnos, pero los principales somos nosotros.

Sería importantísimo que el Heliodoro marcara el primer gol, ¿no?

Sí. Ya sabemos lo bien que va la venta de entradas y no esperaba menos de la afición del Tenerife. Un diez para ellos, otra vez. Los jugadores saben que en un momento malo de partido, la grada los va a levantar.

¿Llegarán todos juntos al estadio para el recibimiento que tienen preparadas las peñas?

No. Será como siempre. Hemos quedado a las cuatro en el estadio. No sé si en un momento dado esperarán o no para entrar y que así las peñas se sientan identificadas con el equipo y que estén todos juntos. Eso me parecería bien.