Cuando la satisfacción era colectiva al comprobar que Alejandro Martínez e Israel Martín contaban ¡por fin! con todos sus efectivos trabajando a buen nivel... ¡susto! Nicolás Richotti se siente mal, con mareos, siendo conducido al vestuario por el segundo entrenador aurinegro. Minutos más tarde, con el rostro pálido, regresa para tumbarse en el banquillo, con los pies sobre un balón medicinal y recibir de manos de Eliseo Bento un sobre de Almax. "Sufrí un mareo, estaba indispuesto, quizás por algo que comí y me cayó mal", indicó el jugador a EL DÍA -único medio presente en la sesión vespertina-, para añadir de inmediato: "Pero no hay que preocuparse que estaré bien para el partido".

Richy Guillén, entre algodones.- El pívot participó en tres cuartas partes del entrenamiento, si bien Martínez optó por darle descanso cuando llegó el cinco contra cinco. Guillén acabó el trabajo con hielo en la parte inferior de su rodilla derecha. "Le hemos reservado como medida de precaución", indicó el entrenador canarista. No habrá problemas para que Richy sea de la partida ante el Lleida.

Trece jugadores, ¡un lujazo!.- Salvo el citado contratiempo del italo-argentino, de resto muy bien para el equipo, pues contar de los trece jugadores se considera un privilegio después de tres jornadas y más de 60 días de trabajo.

El entrenamiento contó de la series habituales de ejercicios con balón, disputándose partidillos en toda la cancha de tres equipos de cuatro. De negro formaron: Ormazábal, Heras, Yáñez y Guillén. En el bando amarillo: Sabat, Gansey, Rod y Serrano. En el naranja: Urreizti -también se le dio descanso en el posterior cinco contra cinco-, Romén, Chagoyen y Koshwal. Ya por entonces se había retirado Nico Richotti.

En el partido los equipos formaron así: Sabat, Gansey, Yáñez, Chagoyen y Serrano (de amarillos), formando con los negros: Ormazábal, Heras, Rod, Romén y "Mac" Koshwal.

Tras 90 minutos de trabajo se dio por concluida la sesión, notándose mejor cara a Richotti, mientras que Iker, con su optimismo tradicional, señaló con relación al partido de mañana: "Tenemos que ganarlo y no tengo la menor duda de que va a ser así".

Los canaristas repetirán hoy el mismo guión de trabajo -doble sesión además del martes, tendrán luego una sesión de tiro el miércoles por la mañana y esa misma noche se medirán al conjunto ilerdense.

En cuanto a las opciones de Rod y Heras, ambos se han metido de lleno en el quehacer del grupo y responden muy bien, pero su presencia mañana, si se produce, va a depender de la marcha del encuentro.