El ministro británico de Exteriores, William Hague, condenó hoy el lanzamiento de cohetes contra Israel desde Gaza y pidió a ambas partes en conflicto "contención" para evitar una escalada de la violencia.

En un comunicado, el ministro expresa su "profunda preocupación" por el aumento de las hostilidades en los últimos días en la franja de Gaza y el sur de Israel.

Hague pide "a Hamás y a otros grupos de militantes detener los ataques" con cohetes y subraya que "el pueblo de Israel tiene derecho a vivir sin un temor constante por su seguridad".

También señala que, igualmente, "la gente de Gaza tiene derecho a vivir en paz".

"Ambas partes deben hacer el máximo para actuar con contención y evitar la pérdida de vida inocente", dice el jefe de la diplomacia británica en la nota.

Hague recuerda que los Gobiernos palestino e israelí "tienen la responsabilidad de respetar plenamente el alto el fuego de noviembre de 2012 y abordar las causas subyacentes del conflicto y la inestabilidad en Gaza".

"Una peligrosa escalada no interesa a nadie y sería muy dañina para las perspectivas del proceso de paz en Oriente Medio", asevera.

El gabinete de seguridad israelí decidió hoy llamar a filas a 40.000 reservistas en preparación para una posible incursión por tierra en la franja de Gaza como parte de la ofensiva "Margen Protector" iniciada ayer, según informaron medios locales.

Israel inició ayer una nueva operación militar contra Gaza, que denominó "Margen Protector", cuyos objetivos, según dijo, son frenar el lanzamiento de cohetes desde la franja y golpear a Hamás, al que considera responsable del asesinato de tres estudiantes israelíes desaparecidos el 12 de junio en la Cisjordania ocupada.

Desde entonces, milicianos palestinos han lanzado desde Gaza cerca de 300 cohetes contra el sur de israel, que han causado heridas de metralla a tres soldados.

En los bombardeos israelíes han muerto desde anoche 11 palestinos, seis de ellos milicianos y cinco civiles, entre los cuales hay dos menores, y 40 personas han resultado heridas, de acuerdo con fuentes sanitarias.