El gobierno alemán apremió hoy a Siria a someter a la inspección internacional su presunto arsenal de armas químicas y atenerse a los convenios sobre la prohibición "total y absoluta" de este tipo de armamento.

"El proceso de inspección será largo, pero la actuación en esa dirección debe iniciarse de inmediato", indicó el ministro alemán de Asuntos Exteriores, Guido Westerwelle, en una intervención ante los medios de comunicación centrada en la llegada mañana del primer grupo de los 5.000 refugiados sirios que acogerá Alemania.

Westerwelle rehuyó concretar un posible calendario para esas inspecciones, así como si Alemania está dispuesta a participar en las labores de inspección o cómo deben realizarse las operaciones.

"Lo fundamental es que se inicie cuanto antes ese proceso y que Damasco dé señales claras y serias de su disposición a aclarar lo ocurrido el pasado 21 de agosto", indicó el ministro, en alusión a los ataques con armas químicas realizados en esa fecha.

Westerwelle ratificó asimismo el apoyo del gobierno de Angela Merkel a la postura de Estados Unidos y a la decisión de no atacar al régimen de Bashar al Asad si se somete al control internacional y entrega su supuesto arsenal de armas químicas.

Desde el Ejecutivo de Berlín se elogió ayer el consenso alcanzado dentro de la Unión Europea (UE) ante el conflicto sirio y que se apostara por esperar a conocer el informe de los expertos de la ONU que recogieron pruebas del ataque sobre el terreno antes de actuar.